Consuma, el punto de la alegría, risas y comercio

Uno de los eventos más esperados para las fiestas agostinas espera atraer a medio millón de visitantes con una propuesta que incluye comercios de bajo costo y casas comerciales con diversos productos y servicios. Además está generando 400 empleos temporales

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El concepto 'outlet' y los artículos económicos son parte de la oferta de bajo costo para los consumidores. foto EDH /miguel villalta

Por Juan José Morales negocios@eldiariodehoy.com

2013-08-02 12:00:00

La fila que siguen cientos de salvadoreños devotos a la diversión conduce a una estrecha puerta donde coincide el comercio, las risas y la alegría.

Es una extraña combinación adornada con la sazón de los churros españoles, los elotes locos y aquellas comidas que los salvadoreños degustan en una época donde la economía se comporta como la montaña rusa, reina de los ascensos y descensos esporádicos.

Pero el deseo de un niño va más allá de un juguete o una atracción de feria. Quiere experimentar emociones y, como su padre o su madre, necesitan de un estimulante. El mejor ejemplo de esta expresión agostina es Consuma, un concepto que por 25 años desafía al ‘Chichimeco’ y ‘la Gigantona’ en el imaginario local. Cuestión permanente.

Hoy, los 144 mil metros cuadrados del Centro Internacional de Ferias y Convenciones (Cifco) concentran la esencia del comercio y de los negocios, tan apegados a fechas como la misma idiosincracia del salvadoreño. Grandes, medianas y pequeñas empresas saben que Consuma es un punto de partida para llegar a muchos mercados, de forma agresiva y con el menor riesgo. En oferta.

La expresión de esto son los bazares y las tiendas ‘outlet’ que buscan seducir a las personas con precios bajos, sin descuidar la diversidad de la oferta y la calidad de los productos.

Ahí, mujeres y hombres remueven grandes cajones y buscan su objeto de deseo mientras los niños inquietos señalan las ruedas como su lugar, del cual no se quieren bajar para reír y soñar.

Para Carmen Chacón, gerente comercial del Cifco, la propuesta familiar del evento es lo que más atrae a los salvadoreños y ha permitido que en las últimas ediciones el nivel de asistencia haya aumentado en un 30 %.

“Es una opción económicamente viable para que las personas puedan compartir con su familia sin salir de San Salvador. Ya es toda una tradición para estos días”, detalló.

Los Álvarez – Martínez son una familia que no se pierde ninguna edición de Consuma porque sus hijos son fanáticos de los carros chocones y ellos encuentran muchas promociones en artículos para el hogar.

Esta es la principal razón por la que muchos llegan: nadie sale cabizbajo, todos contentos. Por un momento se olvidan de la violencia del día a día.

“Hay momentos donde no se puede ni caminar pero los niños están felices y nosotros podemos compartir un momento diferente a la rutina”, sintetizó José Álvarez, un fervoroso ‘consumidor’.

Así, Consuma ha logrado reunir a casi 500 expositores, de los cuales 150 son pequeños empresarios, sobre todo artesanos o productores de mercancías no tradicionales de diferentes zonas del país.

Por ello, se busca llegar a 500 mil visitantes al final del la feria, con un promedio de 50 mil personas cada día, según estimados del Cifco.

“El 60 % del presupuesto de la institución se invierte en Consuma. Es la principal apuesta que realizamos todos los años para lograr la autosostenibilidad de la autónoma”, añadió Chacón.

Del lado de las ruedas los gritos son abundantes, los pabellones son temáticos y las áreas de comidas jamás están vacías.

Pero hay muchos que buscan el ‘Oasis’ y otros la recompensa: $300 por encontrar el tesoro, una de las dinámicas que se han creado para dar valor agregado al $1.50 por persona que se cancela para ingresar.

También una de las iniciativas es la hora regalona, un concurso que se realiza entre las 6:00 y 8:00 de la noche para regalar televisores, equipos de sonido y otros electrodomésticos, según informó Chacón.

Hay que destacar que grandes marcas comerciales también tienen sus estands y que, para aprovechar la temporada, están ofreciendo una diversidad de productos y servicios a precio de feria. Incluso ofrecen créditos instantáneos y diversas facilidades de pago.

Cuestión de payasos

Dentro del mismo campo de Consuma hay gente que realmente busca ‘hacer su agosto’.

En la formalidad también hay informalidad. Y por ello hay personas que logran comercializar desde dulces tradicionales hasta risas.

Muchos payasos han encontrado entre la multitud una manera de ganarse unos centavos para llevar algo más que comida a sus hogares.

“Tenemos que aprovechar, hacer algún malabar y confiar en que hasta a nosotros nos saldrá algo, sin importar si estamos o no autorizados”, dijo un artista, que no reveló su identidad. Ellos tienen chance a falta de los conciertos, otrora atractivo de la feria.

Otro punto a destacar es que se han aprovechado más las zonas verdes del recinto con la instalación de juegos inflables y una área interactiva, gracias a las marcas que están patrocinando el evento.

Todos caminan, una, otra y mil veces. Algunos solo contemplan, otros solo observan y en el más común de los casos ni se inmutan. Pero siempre llega un punto donde los capitalinos recuerdan que agosto se pensó para buscar un centavo en la bolsa para crear risas o la más simple expresión de diversión: la sonrisa. Es parte de la puesta en escena de Consuma.