“Debe obedecerse a la Sala de lo Constitucional”

Entrevista. Rubén Zamora, embajador en Washington

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Rubén Zamora, embajador de El Salvador ante Estados Unidos participó en las reuniones con la MCC. Foto EDH /Tomás Guevara

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2013-08-24 7:00:00

El máximo representante de El Salvador ante la Casa Blanca, Rubén Zamora, espera con optimismo la decisión final sobre el Segundo Compacto por el que compite el país, entre tres finalistas del mundo, que buscan tener una jugosa donación de la cooperación estadounidense.

¿Cuánto ha avanzado la discusión del Segundo Compacto para el país?

La MCC le expresó al Congreso de los Estados Unidos que iba hacer un contrato con El Salvador de cooperación en un Segundo Compacto, que es una ayuda para programas de cinco años, ese proceso ya terminó; la ley les da 15 días a los comités del Congreso para que puedan hacer observaciones… una vez este no hizo ninguna objeción, vino nuestro equipo de salvadoreños que se ha reunido todos los días con el equipo de la MCC… el último día llegaron a la conclusión del contrato que se va ha presentar a la junta directiva de la MCC.

¿La embajadora Mari Carmen Aponte advirtió que los conflictos institucionales en el país podrían tener un impacto negativo en la decisión de la MCC. ¿Qué opina?

Eso así es, porque la colaboración que da esta organización, tiene una serie de indicadores que se refieren, no solo a lo económico, sino también a cuestiones políticas, si la democracia está caminando bien; si hay armonía en el país, si la corrupción se está combatiendo; son 20 indicadores que ellos van evaluando, y si la cosa no está bien, o no hay progresos dijéramos, no dan la ayuda.

¿El riesgo que se corre?

Creo que las palabras de la embajadora Aponte se referían a eso, obviamente el poder ejecutivo que es a quien nosotros representamos en esto tiene que tener una actitud muy respetuosa, (el conflicto) es una situación al interior de otro poder del Estado que es el poder Judicial y al cual hay que respetar y el presidente Funes ha sido un gran ejemplo de eso, él dice: “Esto no me gusta, me entorpece”, pero si es la Sala de lo Constitucional la que lo ordena, no hay más que obedecer.