Pocos buses y microbuses de la zona oriente de la capital sobrevivirían con la entrada en vigencia del Sistema Integrado de Transporte para el área Metropolitana de San Salvador (Sitramss), si se sigue la recomendación de usar sólo aquellas unidades que califica de rentables por tener menos de cuatro años de fabricación.
En esa zona, que comprende Soyapango e Ilopango, sólo hay 3 buses y 113 microbuses que cumplen con estos requisitos, según el “Estudio para la estructuración e ingeniería básica para el Sistema Integrado de Transporte del Área Metropolitana de San Salvador”, con fecha 24 de octubre de 2012, y al cual tuvo acceso El Diario de Hoy.
El estudio califica de poco rentables las unidades que tienen entre cinco y nueve años de fabricación y de las cuales hay 55 buses y 174 microbuses.
Si los vehículos son aún más antiguos la recomendación del estudio es que “deben ser sacados”. Esto se traduce en mil 66 unidades entre buses y microbuses que serían retirados de circulación.
El estudio hecho por el consorcio Acciona Ingeniería-Ttc-Escallón Morales expone que en ese tramo hay 51 rutas del transporte colectivo que actualmente transitan por el sector de Soyapango e Ilopango hacia el centro de San Salvador.
Sin embargo, al restablecer las rutas con el nuevo modelo quedarían sólo 35 rutas alimentadoras que llegarán a la terminal de Soyapango, donde se integrarán a las rutas troncales o pretroncales.
Estos datos tienen preocupados a los buseros de esa zona. Recientemente un grupo de transportistas de ese sector llegó al Viceministerio de Transporte (VMT) para reunirse con el titular de esa dependencia, Nelson García, en busca de explicaciones, las cuales no consiguieron.
En el estudio antes citado existe a detalle el estado de la flota actual, los tramos de recorrido y otras especificaciones, lo que permite al VMT tener un panorama completo de la zona y en base a eso decidir el futuro de cada bus o microbús.
El estudio detectó que hay 58 buses y 287 microbuses que tienen menos de 10 años y pueden ser reutilizados para el corredor, el resto del universo de 1,411 deberán ser sacados fuera del sistema.
Se estima que el 76 % de los vehículos que transitan por el corredor de Soyapango hasta el centro de San Salvador tienen más de 10 años. Siendo así, saldrían de circulación 1,066 buses y microbuses.
El estudio determinó que, de las unidades convencionales que alimentarán al Sitramss, sólo 789 buses y 622 microbuses que están en el rango de antigüedad de 0 a 4 años, son aptos para prestar el servicio.
El documento también expone que el sistema de rutas de la fase 1 del sector de oriente estará compuesto por tres tipo de rutas: las troncales, las pretroncales y las alimentadoras.
Las rutas troncales serán atendidas por buses de alta y media capacidad. Es decir, buses articulados con capacidad para 160 pasajeros o buses padrones para 105 y se dividirán en rutas troncales expresas, finalidad que tendrá solo el Sitramss desde Soyapango hasta las inmediaciones del Hospital Médico Quirúrgico (MQ) sobre la Juan Pablo II. Mientras que las rutas paradoras, atenderán todas las paradas del corredor.
Las rutas pretroncales tienen la característica de circular por el corredor troncal en los carriles exclusivos y también fuera de este, es decir, pueden circular por los carriles mixtos junto al tráfico privado. En este caso los buses a utilizar serán padrones.
Con esto se pretende disminuir los transbordos de viajes al centro de San Salvador.
El documento recomienda que las rutas pretroncales salgan desde San Bartolo y San Martín hacia el centro de San Salvador, sin entrar a la terminal de integración de Soyapango.
Un tercer servicio son las rutas alimentadoras que cumplirán con la función de captación o distribución de la demanda en las colonias.
Estás circularán por la red vial en condiciones de tráfico mixto, es decir, con los vehículos particulares, y prestarán sus servicios con buses de tamaño convencional y microbuses.
Tipos de buses
La demanda de este corredor en cuanto a la selección de los tipos de vehículos del nuevo sistema incluye el bus articulado con capacidad para 160 pasajeros, 48 sentados y 112 de pie, con puertas del lado izquierdo para el embarque y desembarque de los usuarios a nivel de plataforma en las paradas.
Por el momento los transportistas de la Sipago, quienes también pretenden tomar las riendas de este proyecto, han expresado que adquirirán 40 buses articulados.
El bus padrón con capacidad para 105 pasajeros será utilizado para las rutas troncales y pretroncales, igual tiene que contar con puertas del lado izquierdo para que los usuarios pueden subir y bajar de unidades sin mayores dificultades. Este bus puede operar el corredor troncal o fuera de este con el tráfico particular.
En febrero los ocho directivos de la Sipago, junto al titular del VMT, Nelson García y el director de inversiones y negocios de Subes El Salvador, Eduardo Villanueva, viajaron a Brasil para visitar algunos proveedores de este tipo de buses.
El funcionario García comentó que los transportistas se habían decantado por buses de carrocería marca Marcopolo con chasis Volvo. Sin embargo, no especificó el precio que tendrán las unidades.
No obstante el estudio especifica, en la página 93, que en el mercado el costo de un bus articulado ronda los 200 mil dólares cada uno, precio que fue consultado en diciembre de 2009.
El viceministro de transporte, Nelson García que dentro de unas semanas iniciarán con la construcción de los carriles segregados, pese a que la orden de inicio se dio el miércoles 20 de marzo.
Se estima que la construcción de este tramo será de nueve meses, pretenden que este listo para diciembre, comentó el funcionario.
Combustible
El consorcio propone que el tipo de combustible a utilizar para el Sitramss debería ser tipo Euro III, es decir, lo mas refinado posible de materias contaminantes, tanto para el ser humano como para el entorno ambiental.
Este tipo de combustible tendría que ser adoptado por los transportistas que participen en el Sitramss, ya que el uso de un combustible menos refinado disminuiría la vida útil de los motores.
El Salvador cuenta con dos refinerías que producen este tipo de combustible, por lo que tendría que ser asequible, es decir, disponible a un precio razonable.
Un experto en el tema de combustibles, consultado por este periódico, explicó que sólo dos gasolineras, pertenecientes a una sola refinería, son las que pueden distribuir este tipo de combustible.
El problema, aseguró el experto, es que esta refinería nunca ha producido una cantidad de Diésel suficiente para abastecer al mercado salvadoreño, que por lo general consume 16 millones de galones por mes, lo cual obliga a importar Diésel para satisfacer la demanda.
También explicó que el Diésel que se utiliza en el país, ya sea importado o producido por la refinería, tiene el 0.5 % de azufre como máximo aceptable (valor que también se conoce como 5,000 partes por millón, ó 500 ppm).
Esto significa que el marco regulatorio en Centro América es muy tolerante. Y ese es el problema para cumplir con las normas Euro, pues este porcentaje es 10 veces más alto que el que se acepta en Estados Unidos (que es de 0.05 %, valor también conocido como 500 ppm (partes de impureza que hay en un combustible sobre el total del producto).
Así mismo comentó, que se da el caso que las petroleras muchas veces reciben barcos con Diésel provenientes de Estados Unidos, que lo exportan porque al tener tan elevado porcentaje de azufre tienen prohibido comercializarlo en dicho país.
Pese a los dilemas que pueda tener el Sitramss y sus actores principales, las autoridades gubernamentales aseguran que todo estará listo para echarlo a andar en 2014, un año en el que el país vivirá la experiencia pre electoral hacia el nombramiento de un nuevo gobierno.