El obispo auxiliar de San Salvador, monseñor Gregorio Rosa Chávez, pidió ayer al gobierno y a los transportistas que alcancen una solución a la problemática del transporte público que vaya más por el bien común de las grandes mayorías.
“Espero que la mesa (de transporte) dé resultados, aquí hay mucho que resolver, mucho que cambiar y el pueblo tiene que ser el que gane”, dijo Rosa Chávez.
Agregó que en el campo del transporte público ha reinado la corrupción que ha derivado en los actuales problemas que tiene el sector.
Rosa Chávez dijo que es necesario que el gobierno mantenga el subsidio al transporte para que el pasaje no suba y evitar que pueda afectar a la mayoría de salvadoreños.
Cuestionó a los empresarios del transporte público que alegan que ese negocio no es rentable y sostuvo que “si este sector no fuera productivo no habrían transportistas, habría vendedores de minutas o de CD o no sé de qué”.
Rosa Chávez dijo que ahora es el momento para que las partes interesadas encuentren la fórmula adecuada que pueda solventar de una vez por todas el problema del transporte.