A un cabecilla de la mara salvatrucha (MS) le impusieron ayer 90 años de prisión por los asesinatos de una mujer secuestrada y de un soldado que intentó rescatarla, y por lesionar a tres personas más.
El Tribunal Antimafia de Sentencia del occidente encontró culpable a Roberto Antonio Henríquez Valle de las muertes del militar Sixto Geovany Ramos Hernández y la joven Ana Deysi Alemán Álvarez, y lesiones a otro soldado y a un policía.
Los homicidios ocurrieron en un enfrentamiento la madrugada del 2 de septiembre de 2011, en San Julián de Acajutla, Sonsonate, cuando soldados y policías trataban de rescatar a Alemán Álvarez, quien había sido secuestrada horas antes por pandilleros.
“Los soldados y los policías expusieron sus vidas para darle cumplimiento al deber de auxilio que había solicitado la madre de la secuestrada”, declaró el fiscal del caso.
A la joven la llevaron a un taller automotriz donde la tuvieron cautiva durante algunos minutos. Los soldados y policías fueron atacados a balazos cuando ingresaron al taller, ataque que repelieron. Los pandilleros estaban ya cavando la tumba clandestina para enterrarla.
El tribunal también condenó por el homicidio al pandillero Denis José Campos Pocasangre, a 30 años; y ordenó 33 años de prisión para Jairo Alexander Figueroa Recinos por el homicidio y por la tenencia ilegal de armas de fuego.