CARACAS. La oposición venezolana “ganará todas” las diputaciones de Amazonas (suroeste) si se repitan los comicios legislativos que el 6 de diciembre eligieron allí a tres opositores y un oficialista “de manera fraudulenta”, según la impugnación, dijo ayer el jefe de la alianza antigubernamental, Jesús Torreralba.
“Es evidente que el Gobierno está entrampado, porque si le da curso a los procesos (de impugnación) y esto termina en una nueva elección, no es que vamos a sacar otra vez los tres diputados, sino los cuatro. Les vamos a quitar al único que sacaron allá”, sostuvo Torrealba, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad (MUD).
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) aceptó la impugnación presentada por candidatos perdedores afines al régimen de Nicolás Maduro, quienes alegaron una supuesta compraventa de votos, lo que redujo de 112 a 109 las diputaciones de los opositores y de 55 a 54 las de oficialistas en todo el país.
El Supremo de Justicia, agregó Torrealba a la emisora caraqueña Unión Radio, no ha pedido información al Consejo Nacional Electoral (CNE) para decidir si ordena o no la repetición de los comicios en Amazonas, demostrando así que “es un apéndice” del gubernamental Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
“El TSJ, actuando como apéndice del PSUV, congela a nuestros tres diputados, pero no procede a hacer lo que habría que hacer si fue un proceso írrito (inválido): repetir las elecciones”, dijo Torrealba.
El dirigente indicó, además, tener “evidencia a nivel de distintos despacho ministeriales” de que el PSUV “está enviando material, dinero, prebendas a Amazonas” para conquistar al electorado de ese estado en caso de que efectivamente se repitan los comicios.
“Este Gobierno que se lo pasa diciendo que estábamos comprando votos inició lo que pretende ser una compra de votos en Amazonas, pero no le va a dar resultado” porque la MUD “le quitará la única diputación que sacaron allá y ganará las cuatro”, repitió.
Proponen que haya diálogo
Por otra parte, los ministros de Exteriores de Argentina, Susana Malcorra, y de España, José Manuel García-Margallo, expresaron su “preocupación” por la situación en Venezuela y apostaron por una solución basada en el diálogo y el consenso para superar la crisis que se vive.
Los ministros dejaron claro que los “principios y valores” de Argentina y España presidirán su relación con Venezuela. El jefe de la diplomacia española recordó que el viernes convocó al embajador de Venezuela en España, Mario Isea, para expresar su rechazo por las palabras de Maduro en las que calificó al jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, de “intervencionista, racista y colonialista”.
Asimismo, le pidió explicaciones por un viaje de políticos españoles de izquierda a finales de 2014 a Caracas en un avión oficial venezolano para participar en un congreso. En este sentido, el ministro español reiteró que para España el viaje y las palabras de Maduro suponen una injerencia absoluta y deseó para Venezuela lo mismo que para España: derechos humanos, democracia y prosperidad económica.
Malcorra dijo que “todo lo que pase en Venezuela lo seguimos muy de cerca” y que cualquier cosa que desestabilice este país tendrá un impacto también desestabilizador en toda la región.