Dos posiciones opuestas ante la crisis política que vive Venezuela tienen los dos partidos mayoritarios del país. ARENA condena el arresto del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, y exige la pronta liberación de Leopoldo López; y por el otro, el FMLN afirma que estos personajes están detrás de acciones encaminadas a dar un golpe de Estado al gobierno de Nicolás Maduro.
“La brutal detención del alcalde de Caracas debe ser repudiada por todos los demócratas, es lamentable que en estos tiempos aún se utilicen mecanismos de intimidación como la privación de libertad violenta para callar a un pueblo. Cada vez que un venezolano en cumplimiento de su derecho constitucional se atreve a criticar al Gobierno inmediatamente le atribuyen el epíteto de conspirador como una forma de amedrentar al pueblo”, afirmó ayer el presidente del Coena, Jorge Velado, en conferencia de prensa.
El FMLN no se pronunció por este hecho, pero en días anteriores emitió un comunicado en donde afirma que son “acciones de desestabilización”, efectuadas por sectores de “ultraderecha”, que lo único que persiguen es derrotar a Nicolás Maduro del gobierno, y que lo anterior atenta contra la “democracia” de la región y, además, hacen un llamado a la comunidad internacional a respaldar a Maduro.
“Hacemos extensiva nuestra solidaridad al pueblo venezolano que con su voto libre ha decidido transformar su nación poniendo recursos naturales, sociales y políticos para impulsar la justicia social, la democracia y la integración latinoamericana”, reza parte del comunicado del partido oficial.
Pero para ARENA lo que Maduro trata de opacar son las demandas de los venezolanos ante las “injusticias y el hambre de un pueblo”, dijo Velado, y añadió que no “pueden callarlo con cárcel”.