El número de muertos tras la explosión de gas la semana pasada en un hospital materno infantil de la ciudad de México se elevó a cuatro, con el deceso de una enfermera que resultó herida cuando ayudaba a evacuar a los niños del lugar.
El gobierno de la ciudad de México informó en un comunicado que la enfermera Mónica Orta Ramírez murió el martes por las heridas que sufrió durante la explosión el jueves en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, que también dejó a más de 70 heridos, la mayoría de los cuales ya fueron dados de alta.
Otra enfermera y dos bebés también murieron.
Orta, de 35 años, participó en la evacuación de los bebés que se encontraban en el hospital, añadió la autoridad capitalina.
Hasta la noche del martes también permanecían hospitalizados 20 pacientes, incluidos nueve recién nacidos.
La explosión ocurrió luego de una fuga en el camión cisterna que abastecía de gas el hospital y destruyó más del 70% del inmueble. Las autoridades aún indagan las causas precisas, pero funcionarios han dicho que podría tratarse de un problema con una válvula del vehículo.