El gobierno de Estados Unidos reveló que el sumo pontífice se involucró “personalmente” en la histórica reanudación del diálogo diplomático entre ambos países.
El papa Francisco jugó un rol “muy importante” en la histórica reanudación de las relaciones diplomáticas entre Estados Unidos y Cuba que comienzan hoy, según lo revelaron fuentes del gobierno norteamericano.
El Pontífice colaboró con flexibilización de relaciones con Cuba al presionar por liberación de estadounidense Alan Gross, aseguró Obama en su discurso.
Por su parte, Raúl Castro, mandatario cubano, agradeció la mediación del Papa.
“Quiero reconocer el apoyo del Vaticano y especialmente del Papa Francisco al mejoramiento de las relaciones”, dijo en un comunicado.
El sumo pontífice “se involucró personalmente” en el asunto para ayudar a abrir un canal de diálogo entre Washington y La Habana.
Más temprano el presidente estadounidense, Barack Obama y su par cubano, Raúl Castro, mantuvieron una conversación telefónica de 45 minutos, la primera de peso político desde 1961.