BUENOS AIRES. Un juez federal argentino ordenó ayer a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que presente las declaraciones de su patrimonio.
La orden judicial es a raíz de una investigación que sigue el juez Claudio Bonadio por presuntas irregularidades en la sociedad Hotesur que administra un hotel en la región de El Calafate, en el sur del país, a la que pertenece Fernández.
Una delegación de la Policía Metropolitana pidió ayer a la Administración Federal de Ingresos Públicos las declaraciones juradas tanto de la mandataria así como la de sus hijos Máximo y Florencia Kirchner, la de su fallecido esposo Néstor Kirchner, además la del empresario Lázaro Báez.
Según el diario español ABC, en su edición electrónica de ayer, Cristina Fernández está entre las cuerdas de la justicia federal argentina “por diversos casos de presunta corrupción que tienen de telón de fondo el lavado de dinero y enriquecimiento ilícito”.
Cristina contraataca
El medio español destaca que el oficialismo argentino se ha enfurecido con el juez por las pesquisas sobre el patrimonio de la presidenta.
“A esta presidenta ningún buitre financiero ni un carancho (ave carroñera) judicial la va a extorsionar”, advirtió ayer la mandataria al reaparecer en público casi un mes después de su convalecencia por una infección intestinal.
Las palabras de Cristina Fernández estaban dirigidas a frenar con la retórica el último frente judicial que la tienen de protagonista y que, de seguir por el mismo camino, le harían muy difícil explicar, con argumentos legales, su fortuna familiar, dice el diario español.
La presidenta argentina calificó de “carancho” al juez Bonadio, el mismo que ordenó registrar la sede (fantasma) de Hotesur S.A. en Buenos Aires, una de las sociedades hoteleras de la presidenta (también de su hijo Máximo) que, curiosamente, resultó ser un piso vacío que nunca fue ocupado como oficina, consigna ABC.
“El oficialismo en pleno, atento a que el nombre de su lideresa se podría acercar peligrosamente a algo muy parecido al banquillo, cerró esta semana filas en torno a Cristina Fernández. Como la presidenta hiciera el martes, ministros y leales apuntaron y hasta amenazaron al juez Bonadío”, indica la publicación.
Algunos de los que han arremetido contra el juez son el ex subsecretario de Tierras y dirigente Luis D?Elía, el mismo que asaltó una comisaría y anunció que defendería “en la calle y a los tiros” a Kirchner “si es necesario”.
En su cuenta de Twitter pidió lo siguiente: “debemos dejar clavada en una pica la cabeza de Bonadio”.
También el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, denunció lo que el califica de “golpismo activo del poder judicial”.
El periódico argentino Clarín publicó que el senador oficialista Marcelo Fuentes presentó ayer una denuncia penal contra el juez Bonadio a partir de la información revelada un día antes por la presidenta argentina, a través de su cuenta en Twitter, sobre la supuesta participación del magistrado en una sociedad comercial.
De acuerdo con Fuentes, ello infringiría el reglamento de la Justicia por cuanto le impide a los jueces ejercer otra actividad rentada más allá de la docencia, dice Clarín.
También pidió en su denuncia que se investigue si el juez se enriqueció de manera ilícita y si pudo haber participado de un lavado de activos.