CHILPANCINGO. Compañeros de los 43 estudiantes desaparecidos de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa atacaron ayer el Palacio de Gobierno de Guerrero para protestar por el transcurso de las investigaciones sobre este caso que ha conmocionado a México y a la comunidad internacional.
Los estudiantes, acompañados por miembros de otras escuelas, llegaron en varios autobuses al Palacio de Gobierno ubicado en Chilpancingo, la capital del estado, y lanzaron piedras y bombas molotov. No hubo intervención policial.
El edificio del Palacio de Gobierno ya había sido atacado el mes pasado por los estudiantes, quienes tampoco aceptan el nombramiento del nuevo gobernador.
Con la protesta de ayer, los estudiantes mostraron su rechazo a la información presentada el viernes por el Gobierno mexicano, que señala que los estudiantes fueron asesinados y luego quemados por los narcos, según el fiscal general, Jesús Murillo Karam.
El funcionario explicó que solo quedaron cenizas de los estudiantes y que parte de esos restos van a ser analizados en un laboratorio de Austria, con la esperanza de que puedan ser identificados.
Pero los familiares de los jóvenes rechazan esa versión oficial y afirman que no confían en la información dada por las autoridades hasta que no haya pruebas concretas, por lo que anunciaron que van a luchar hasta el final para que se sepa la verdad de este caso.
Protesta en el Zócalo
A las protestas en Guerrero se sumaron las de la capital mexicana. Cientos de personas se reunieron en el Zócalo, al centro de la ciudad, para participar en un flashmob (convocatoria en redes sociales) y exigir el regreso con vida de los estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero.
Los participantes se acostaron en la Plaza de la Constitución, luego se levantaron y con los retratos de los 43 estudiantes gritaron sus nombres y el lema: “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
También hubo una marcha que partió de la sede de la Procuraduría General (Fiscalía) hasta el Zócalo. —AGENCIAS.