Un grupo de 165 médicos y enfermeros cubanos viajó a Sierra Leona como parte del apoyo ofrecido por la isla para combatir la epidemia de ébola en el continente africano.
Los profesionales de la salud salieron de la isla el miércoles por la noche y fueron despedidos por el presidente Raúl Castro, indicó un reporte publicado el jueves en la portada del periódico oficial Granma.
“El grupo está conformado por 63 médicos y 102 enfermeros de todo el país, con más de quince años de experiencia”, dijo el rotativo, al señalar que el 80% de ellos ya estuvo alguna vez en el continente africano como parte de diversas misiones de cooperación cubana.
Junto a ellos viajaron varios funcionarios y directivos del grupo que se instalará posteriormente en Liberia y Guinea Conakry y que van “como avanzada con el objetivo de crear las condiciones para el arribo de colaboradores cubanos a ambos países”.
Cuba ofreció en las semanas previas enviar a las tres naciones, las más golpeadas por la epidemia, un total de 461 trabajadores de la salud.
Granma indicó que Castro había despedido junto a la escalerilla del avión con un apretón de manos a los médicos que viajaron.
Medios de prensa cubanos reportaron en las semanas previas que los galenos fueron entrenados en bioseguridad por expertos de la Organización Pnamericana de la Salud y la Organización Mundial de la Salud y se les enseñó entre otros aspectos a vestirse y desvestirse para evitar infecciones con la mortal enfermedad; así como el uso de equipos especiales.
En un centro hospitalario de la capital se instaló un campamento que reflejaba las condiciones de la vida de los galenos en las áreas infectadas.
Funcionarios del sector indicaron que actualmente se desempeñan cooperantes cubanos de la salud en 66 países y unas 39 brigadas participaron en emergencias sanitarias en 23 países.
Cuba desarrolla un amplio programa de envío de médicos sobre todo a países pobres o subdesarrollados para mejorar sus estatus de prevención, pero también cuenta con una brigada llamada “Henry Reeve” para operar en zonas de desastre o en los cuales se desarrolla una epidemia, como en este caso.
La Organización Mundial de la Salud MS dijo el miércoles que el brote de ébola, el peor en la historia del virus, enfermó a más de 7.000 personas, provocando unas 3.300 muertes. Estados Unidos reportó su primer caso el martes.
La organización se mostró además optimista de que habría una vacuna contra el ébola plenamente probada para uso en campañas masivas de vacunación, posiblemente a partir del 2015.