Gobernador declara el estado de emergencia

El Servicio Geológico de los Estados Unidos alertó ayer de que hay un 54 % de posibilidades de que se registre una réplica fuerte en los próximos 7 días

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por

2014-08-24 7:00:00

ESTADOS UNIDOS. El gobernador de California, Jerry Brown, declaró ayer el estado de emergencia en la región al norte del estado que la pasada madrugada experimentó un temblor de magnitud 6.1, el mayor sismo desde 1989.

Brown pidió a las agencias estatales que ayuden en las labores de asistencia tras el terremoto, que causó al menos 87 heridos, daños materiales y cortes eléctricos, en el mayor temblor registrado en la zona desde el sismo de 7.0 grados en Loma Prieta en 1989.

“Mi oficina de servicios de emergencia ha estado completamente activa desde primera hora de la mañana y está trabajando estrechamente con los responsables de emergencia a nivel estatal y local (…) para responder al impacto crítico en estructuras de edificios”, afirmó.

El director general de operaciones del Departamento de Bomberos de Napa, John Callanan, aseguró, en declaraciones a los medios, que la ciudad ha agotado sus recursos tras haber extinguido seis incendios, transportado a residentes heridos y atendido llamadas sobre cortes eléctricos y fugas de gas.

Según el servicio de emergencias de California, la mayor parte de las heridas se produjeron por la caída de objetos dentro de los hogares.

Hasta el momento no se ha determinado la causa del sismo, pero el Servicio Geológico estadounidense (USGS, por su sigla en inglés) indicó que “sospecha” de la sección de Browns Valley en la falla de West Napa.

El temblor de ayer fue seguido media hora después por media docena de seísmos menores, el mayor de los cuales alcanzó los 4 grados, según USGS, que alertó de que hay un 54 % de posibilidades de que se registre una réplica fuerte en los próximos 7 días.

Se trata del terremoto más importante desde el 17 de octubre, en 1989, en Loma Prieta. Dejó un saldo de 63 personas muertas, 3,757 heridos y más de 8,000 personas sin hogar. El más devastador, contado casi con tintes mitológicos, tuvo lugar en 1906. El posterior incendio obligó a, prácticamente, reconstruir la ciudad. Alcanzó 7.9 de magnitud.

—AGENCIAS.