BOGOTÁ. En un fallo clave para el proceso de paz que el Gobierno colombiano negocia con la guerrilla de las FARC desde hace 20 meses en La Habana, la Corte Constitucional dio el visto bueno para que los guerrilleros que dejen las armas puedan participar en política, publicó ayer el diario español El País.
Según el diario, la Corte excluye a aquellos que hayan cometido delitos de lesa humanidad y genocidio.
“Esta era una de las decisiones más esperadas por el Gobierno tras la demanda de inconstitucionalidad que interpuso el exviceministro de Defensa y militante del uribismo, Rafael Guarín, contra la reforma conocida como el Marco para la Paz”, indica el medio y explica que Guarín pretendía que se prohibiera a los guerrilleros la posibilidad de ser elegidos a cargos públicos a través del voto.
Esto significa que el Marco para la Paz, que ya fue aprobado por el Congreso y demandado en otra ocasión, queda intacto y que podrán hacer política los que hayan cometido delitos “menores”.