“¿Cómo me siento? Más madre que monja”, responde con franqueza Roxana Rodríguez, la religiosa salvadoreña de 32 años, a la trabajadora social, Anna Fontanella, mientras da el pecho a Francisco Alejandro, de tan sólo cuatro días y casi cuatro kilos. “Lo llamé Francisco en honor a nuestro Papa sudamericano”, informa “Corriere della Sera”. La agencia italiana ANSA corrobora la información de que se llama Francisco, uno de los nombre más populares de Italia.
El diario italiano ha hablado con el párroco de San Miguel, don Benedetto Falcetti, que ha estado con ella en las últimas horas: “Todo ocurrió en El Salvador, entre marzo y abril del año pasado, cuando Roxana volvió para renovar el pasaporte”, explica Falcetti.
La monja salvadoreña de 32 años, que dijo que desconocía que estaba embarazada, dio a luz el pasado martes en un hospital de la ciudad italiana de Rieti, a donde fue trasladada en ambulancia aquejada de “fuertes dolores en el vientre”, según trascendió a los medios de comunicación italianos.
“No sabía que estaba embarazada, solo tenía un fuerte dolor de vientre”, explicó la religiosa, según recogían hoy los medios locales que citan fuentes del hospital donde dio a luz.