Obama busca reformar sistema hipotecario de EE.UU.

Durante su alocución en Phoenix sobre las políticas hipotecarias, Obama habló de una amplia reforma al sistema hipotecario estadounidense

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elsalvador.com

Por AP

2013-08-06 3:15:00

Animado por un mercado inmobiliario que mejora, el presidente Barack Obama propuso el martes una amplia reforma del sistema de financiamiento hipotecario de Estados Unidos, incluyendo el cierre de las agencias respaldadas por el gobierno Fannie Mae y Freddie Mac. Declaró que los contribuyentes nunca más deben “pagar los platos rotos” por malas apuestas de los gigantes hipotecarios.

Obama presentó sus propuestas en Phoenix, una ciudad que sufrió un gran número de ejecuciones hipotecarias y que fue el epicentro de la crisis de la vivienda del país. El mercado inmobiliario de Phoenix, así como muchas otras partes del país, se ha recuperado fuertemente: los precios en la ciudad han subido hasta 66% desde el mínimo que tocaron en 2011.

A pesar de los avances en todo el país, el presidente dijo que aún se necesitan amplias reformas en el sector de la vivienda para garantizar que el mercado rejuvenecido no “vuelva a inflar la burbuja inmobiliaria”. La piedra angular de este esfuerzo será el cierre de Fannie Mae y Freddie Mac, una propuesta que cuenta con el apoyo de ambos partidos en el Senado.

“Durante mucho tiempo, a estas empresas se les permitió obtener grandes ganancias comprando hipotecas, a sabiendas de que si sus apuestas salían mal, los contribuyentes terminarían pagando los platos rotos”, dijo Obama a más de 2,000 personas en una escuela secundaria de la zona. Habló después de visitar una empresa de construcción que contrató a cientos de trabajadores como consecuencia de la recuperación de la vivienda en la región.

Aunque el presidente ya había apoyado la idea de reformar Fannie y Freddie, su discurso del martes fue la primera vez que expuso sus prioridades específicas para hacerlo.

El presidente quiere reemplazar Fannie y Freddie con un sistema que colocaría el riesgo de los préstamos principalmente en el sector privado, y no en el gobierno, si bien el gobierno seguiría involucrado, en la supervisión y como garante de préstamos de último recurso.

Obama también busca garantías de que un sistema de financiamiento hipotecario encabezado por el sector privado seguiría garantizando un amplio acceso a hipotecas a 30 años a tasa fija.