La novia del príncipe Harry podría ser parte de la familia real algún día. Para cuando eso sucede su vida sin duda cambiará, no solo porque se involucrará en asuntos más serios, si no porque tendrá que seguir las reglas que impone el Palacio de Kensington.
Aunque parezcan extrañas y quizá no entendamos la razón de estas normas, para Meghan seguramente se tratará de un sacrificio que estaría dispuesta a hacer, por convertirse en princesa.
Estas son las reglas:
Príncipe Enrique se refugió en el boxeo y terapia para superar la muerte de su madre
1. No emitirá opiniones políticas
Meghan no podrá hablar sobre este tema, pues es una tradición de la familia. Todos sus miembros se mantienen callados, porque uno de sus ancestros perdió la cabeza en la guerra civil. Sin embargo está admitido que voten durante las elecciones.
2. ¡Adiós mariscos!
Nadie en la realeza puede comer mariscos, están prohibidos en el menú pues el objetivo es prevenir intoxicaciones. Una enfermedad es obstáculo grave, para que cualquier miembro no pueda ejercer importantes labores.
Crean un “reality” para competir por el amor del príncipe Enrique
3. Juego prohibido
El príncipe Andrés de York prohibió que se jugara Monopoly, porque lo consideraba un juego agresivo.
4. Mantener el rango
La regla más importante es saber cuál es su lugar como miembro de la familia real, no solo en ese sentido, si no también tener claro al lado de quién se mantendrá de pie cuando deban presentarse en público. El actual orden es que la reina Isabel y Felipe están al lado izquierdo, le siguen el príncipe Carlos y Camilla, William y Kate, y Harry. Junto a Harry estaría Meghan.
