Más de un centenar de niños y adolescentes, desde preparatoria hasta tercer ciclo, visitaron el sábado el Museo de Arte (Marte), luego de un día y medio en transporte terrestre. Los estudiantes viajaron desde la zona limítrofe con Honduras, en la zona norte de Morazán. Los alumnos pertenecen a los centros escolares Rancho Quemado y Joya de Talchiga, dos de una veintena que ya se han visto beneficiados del programa “Vamos al Museo”, patrocinado por un joven estadounidense que vive en Londres, Inglaterra, y que tiene menos de un año de haber sido creado.
Según explicó Violeta Renderos, directora educativa del Marte, los estudiantes han podido tener la oportunidad de visitar el museo gracias al programa de Nicolás Opinsky, quien se encarga de recaudar los fondos para disponer de unos 10 mil dólares al año para transportar a estudiantes de escasos recursos durante ese año.
“Nicolás nos visitó en el 2014, como voluntario, y se dio cuenta de que muchas escuelas no pueden venir porque carecen de fondos. Solo para que estos niños puedan estar acá se necesitaban 1,200 dólares, por ejemplo”, anotó Renderos.
Los 120 salieron desde tempranas horas de la mañana del viernes pasado, durmieron en San Francisco Gotera y terminaron llegando al Marte alrededor de las 10:30 de la mañana del sábado.
Otras instituciones como Fundemas, la Organización No Gubernamental (ONG) que se encarga de toda la logística del transporte y de los gastos en los alimentos.
Solo en este año ya han sido transportados unos 700 niños con los fondos donados por Opinsky, quienes son atendidos por el programa del Ministerio de Educación (Mined), conocido como Proyecto Marte-Mined, que se encarga específicamente de organizar y dirigir las actividades que desarrollan los grupos de estudiantes que visitan el museo a lo largo del año.
“Para nosotros es una alegría recibir a estas dos escuelas. Es una suma de esfuerzos y voluntades para que estos chicos puedan estar hoy aquí”, recalcó la directora educativa.
El programa Marte-Mined cuenta con un presupuesto que para 2015 ascendió a 22,500 dólares y atiende no solo a los estudiantes transportados por Opinsky, sino al resto de grupos estudiantiles que visitan el museo desde todas partes del país. Su meta es recibir a unos 7,000 alumnos cada año y tiene ya seis años funcionando.
La atención que este programa brinda a los estudiantes consiste en el desarrollo de varias actividades culturales.
A manera de ejemplo, el Mined entregó para la visita de estos escolares de Morazán (algunos de ellos hondureños) los materiales educativos y asignó cuatro guías-tutores que se encargaron de organizar y dirigir talleres de pintura, visitas guiadas por el interior del museo y el armado de un rompecabezas gigante, detalló el guía-tutor del proyecto Ismar Rivas.