El exfutbolista ha agregado un nuevo tatuaje a su cuerpo: el número 99 en su dedo meñique. Esta vez el motivo no han sido sus hijos, sino su esposa, la famosa diseñadora, Victoria. 99 son los digitos finales de 1999, el año en que contrajeron matrimonio el futbolista de élite y la entonces cantante de la banda británica Spice girl.
Fue un año excelente, dice el deportista, que el 4 de julio iniciaba una carrera de felicidad que empezaba casi de inmediato con la llegada de Broklyn, que ya tiene 16 años, al que siguieron Romeo, ahora con 12, Criz, de 10, y Harper Seven de cuatro.
También es el año en que Beckham fue factor definitivo para el éxito de su equipo, el Manchester United, que atesoró los mejores logros de su historia, la Premier League, la F.A. Cup y la Champions League.
El astro del fútbol tiene más de 30 tatuajes en todo su cuerpo, ritual que comenzó en 1999 con el nacimiento de su primer hijo y ya convirtió en un clásico: tiene un tatuaje dedicado a cada uno de sus cuatro pequeños. En la espalda tiene los nombres Brooklyn, Romeo y Cruz, con la imagen de un ángel de la guarda. Y en el pecho, grabó el nombre de su hija menor, Harper Seven.
Otros tres pequeños tiene en su pecho: tres niños sosteniendo a Jesucristo. Tal como publica ABC.es, él mismo explicó que significa esta imagen: “Los querubines son los chicos y, de alguna forma, representan que espero que mis hijos cuiden de mí”. Además, desde 2004, el futbolista lleva en su cuerpo una cruz alada. ¿Qué representa? “Un talismán religioso que tiene el fin de proteger a mis hijos”, dijo según dicho portal.
Mientras Victoria, no sólo tiene un lugar en lo más íntimo de su corazón, sino también en una de las partes más visibles de su cuerpo. En su brazo izquierdo tiene grabado el nombre de su esposa junto a una inscripción hebrea que reza “Yo soy de mi amado mi amado es mío”.
Otro de sus últimos tatuaje es un proverbio chino: “La vida y la muerte están determinadas por el destino, rango y riqueza decretado por el Cielo”.