Derby es un perro que nació con una deformidad congénita, por lo que sus patas delanteras no se desarrollaron como las de otros canes, según detalla nydailynews.com.
Sin embargo, gracias a sus prótesis impresas en 3D, ahora puede caminar y correr libremente.
Las patas circulares de repuesto de Derby fueron creadas por una firma que viene trabajando con la impresora 3D Proyecto 5500X.
La idea de una prótesis para el perro la tuvo Tara Anderson, directora de gestión de producto de 3D Systems, quien decidió ayudar a la mascota.
Al inicio, Derby recibió una especie de silla de ruedas, pero limitaba sus movimientos. Entonces, Anderson y su equipo diseñaron unas prótesis curvas y suaves.
“No me sentí realmente impresionado al principio, pero cuando lo vi corriendo así, fue increíble”, dijo Dom Portanova, dueño del peludito. “No podía creerlo”, agregó.
El caso de Derby, que vive en Massachusetts, EE.UU., no es único en su especie, aunque no por ello deja de ser peculiar y permite entrever las amplísimas posibilidades que la impresión 3D tiene para mejorar la calidad de vida.