Hace tres días en el hospital nacional de Ahuachapán atendieron un parto de siamesas. Las niñas llegaron al mundo unidas por el abdomen.
Las bebés fueron trasladadas al Bloom el lunes por la mañana para que se vea la factibilidad de separarlas, ellas se encuentran ingresadas en el Servicio de Neonatología sin complicaciones de salud, confirmó Carlos Mena, jefe de Epidemiología del centro infantil.
Las gemelas llegaron al mundo a las 34 semanas de gestación, ambas pesan 3,110 gramos.
De acuerdo con los datos proporcionados por autoridades del Bloom, se trata del cuarto parto de la señora.
Mena manifestó que las niñas fueron trasladadas ayer al hospital nacional Rosales para que les realizaran una resonancia magnética, un estudio de imágenes detallado, y determinar qué órganos compartían.
Se trata del primer caso de siamesas atendidas este año en el establecimiento de atención infantil.
“Al parecer lo único que comparten es el hígado, eso indica que no comparten un órgano tan vital, entonces que es factible (separarlas)”, comentó el epidemiólogo; luego añadió que “eso lo van a decidir los cirujanos”.
Mena agregó que en Ahuachapán a la señora le iban a practicar una cesárea porque creían que “la niña venía atravesada”, desconocían que se trataba de siamesas.
“Al hacer la cesárea vieron que era un parto de siamesas, están unidas a nivel del abdomen; están en buen estado”, agregó el jefe de Epidemiología.
Los casos de gemelas unidas son poco frecuentes. Se estima que se presenta en uno de cada 100 mil partos.
Este tipo de malformación congénita ocurre por una división tardía de un embarazo gemelar.
Pero en Maternidad por ser el centro de referencia, atienden aproximadamente uno por cada 15 mil alumbramientos, uno cada año y medio.
Las recién nacidas se encuentran estables, sin respiración asistida, confirmó Mena.
En estudio
Un equipo de especialistas determinarán la factibilidad de separar a las bebés luego de completar los estudios clínicos.
Mena expresó que para practicar la operación las gemelas deben estar en buen estado de salud y dependerá de la evaluación de los cirujanos programar la intervención quirúrgica.
“Hay que esperar que deciden los cirujanos, si las van a separar y en qué momento lo van hacer. Hay que determinar si es factible o no”, acotó el médico.
En el hospital Bloom ya tienen experiencia en este tipo de procedimientos. El 1 de enero de 2008 separaron con éxito a los hermanos santanecos Romero Castro, ellos nacieron unidos por el abdomen y compartían la parte media del hígado.
En marzo de ese año también separaron a unos varones que estaban unidos por el tórax, solo uno de ellos tenía corazón, ambos fallecieron con días de diferencia.
El caso más reciente es el de Milagro y Elisa, ambas nacieron el 18 de junio 2013 en el hospital nacional de Maternidad. Las infantes estaban unidas por la parte del ombligo, compartían una parte del hígado, a través del abdomen, existía una fusión del borde anterior de ambos órganos.
El 30 de junio del año pasado, en Maternidad, especialistas de ese centro y del Bloom separaron de emergencia a las gemelas, una de ellas presentaba problemas cardíacos, una falleció.
En el país los casos más comunes de gemelas unidas son los toracópagos que comparten la cavidad torácica y en ocasiones el corazón; le siguen los unidos por el abdomen. En el Bloom, el doctor Ulises Iraheta ha sido quien ha estado a la cabeza de las cirugías.