La evaluación de la realidad, el pensamiento crítico y las habilidades comunicativas son algunas de las cualidades que sobresalieron en los jóvenes ganadores del primer torneo del Club de Debate, una iniciativa de El Diario de Hoy y Glasswing International.
Por ello, Fabricio Altamirano, Director Ejecutivo de Grupo Editorial Altamirano, entregó tabletas electrónicas a cada uno de los ganadores del primer lugar.
En la categoría de tercer ciclo, un grupo de tres jóvenes del centro escolar Marcelino García Flamenco fue el ganador, mientras que el primer lugar en la categoría de bachillerato fue para un colectivo del Complejo Educativo Walter Arturo Soundy.
Asimismo los estudiantes que lograron el segundo lugar en ambas categorías recibieron MP4. En la categoría tercer ciclo los galardonados fueron jóvenes del centro escolar República de Canadá, y en bachillerato otro grupo del Complejo Educativo Walter Arturo Soundy.
Además, tanto los ganadores del primero, segundo y tercer lugar recibieron medallas de reconocimiento. Y todos los participantes obtuvieron certificados de participación.
También se eligió al mejor orador de cada categoría, quien recibió un trofeo.
Según Maritza Trejo, gerente de Programa de Educación de Glasswing, para el 12 y 19 de octubre se tiene programado el segundo torneo del Club de Debate.
La iniciativa continuará el próximo año, por lo que pretende expandirse e incluir a más escuelas.
Por una cultura de debate
“Es increíble ver el crecimiento de los jóvenes, ya que al principio del club ellos eran tímidos y no querían expresarse, pero a estas alturas son diferentes, se expresan con propiedad y argumentan bien sus ideas”, describe Jessica Alvarado, asesora educativa de Glassging para el Club de Debate.
Y señala que desde el pasado febrero los estudiantes de seis centros educativos de San Salvador y Santa Tecla se han beneficiado con las enseñanzas brindadas por voluntarios, quienes los han preparado para crear en ellos una cultura de debate.
“La preparación que los jóvenes muestran en este tipo de certámenes es para toda la vida, ya que el pensamiento critico, el hecho de expresar sus ideas y las habilidades comunicativas se aprenden para siempre”, asegura Alvarado.
Los 65 estudiantes, aproximadamente, dedican dos horas a las semanas al club, en donde junto a los voluntarios desarrollan y afinan las técnicas de expresión.