Un clásico presidencial

Las guayaberas, de origen cubano, han sido la prenda preferida por varios presidentes de Latinoamérica. En El Salvador podría convertirse en el vestido oficial

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elsalvador.com

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2013-05-18 8:00:00

Cómodas, frescas, con cierto toque de elegancia casual y nada baratas. Así son las guayaberas, la prenda que podría llegar a convertirse en el vestido oficial de El Salvador. O al menos eso pretende el presidente de la República, Mauricio Funes.

El pasado miércoles sorprendió a los asistentes de la presentación del programa de Gobierno para el fomento a la inversión productiva “Creces MIPYME”, cuando al inicio de su discurso anunció: “Estamos por emitir un decreto ejecutivo, sino es lo convertimos en ley de la República, para que la guayabera sea el vestido nacional y oficial del país…”.

Las declaraciones del mandatario provocaron diversidad de reacciones de los salvadoreños en la web. Desde risas y hasta enojo por prestar atención a temas de menos importancia como la moda en lugar de centrarse en los serios problemas del país.

Independientemente de si la guayabera se vuelve “vestido oficial de El Salvador” o no, esta prenda ha sido por muchos años una de las preferidas de varios presidentes, empresarios y gente pudiente.

Ya en El Salvador el expresidente Arturo Armando Molina (entre 1972 y 1977) las usaba con frecuencia en actos públicos, al igual que varios de los funcionarios de esa época.

El origen de las guayaberas es incierto ya que se han creado varias leyendas al respecto. Sin embargo, todas la historias coinciden en que proceden de Cuba.

Una de las historias más frecuentes es “que un buen día un campesino de la zona de Sancti Spíritus -de Cuba- le pidió a su esposa que le hiciera una camisa cómoda para trabajar en el campo. La señora cumplió el encargo sin imaginar que su novedoso diseño iba a popularizarse, primero entre los moradores de esa región, y luego mundialmente”, reseña el sitio www.lecturas.cibercuba.com.

Según coinciden varios sitios de Internet la primera denominación para la camisa fue “yayabera”, debido a que solía usarse en la zona del río Yayabo, interior de Cuba.

Si dice que los campesinos solían guardar guayabas en los bolsillos de la camisa y debido al hábito frecuente pronto comenzaron a llamarle guayabera.

De Cuba a México y el mundo

Durante la época de comercio marítimo entre ambos países la guayabera fue introducida al estado de Yucatán. Varios historiadores afirman que el empresario español Pedro Mercader Gausch se encargó de rediseñar y fabricar la camisa en Mérida, capital de Yucatán.

A finales del siglo XIX cobró fama la tienda “El Encanto”, donde solo los hombres más acomodados podían comprar y lucir una guayabera.

En El Salvador, una de las primeras fabricantes de guayaberas fue Camiserías Norma, a partir de 1944. A partir de esta fecha la prenda cobró popularidad y diversos sectores.

Expansión por El Salvador

En los años 40 en el país se fabricaban principalmente para instituciones educativas privadas, como el Liceo Salvadoreño.

“Hoy en día quienes las compran son los colegios, empresas de seguridad y personas mayores”, describió Sonia Carrillo, encargada de planilla de Camiserías Norma.

Actualmente las guayaberas son usadas principalmente en Cuba, República Dominicana, Perú, Puerto Rico, México, Panamá, Ecuador, Venezuela, en el Caribe colombiano, Centroamérica, Canarias y las Filipinas.

Se fabrican en tejidos de algodón, lino, seda o en telas sintéticas, en manga corta y larga y su precio varía de acuerdo al tejido y los estampados que se le puedan hacer.

Es una prenda que no falta en el closet de quienes son o han sido presidentes. Entre ellos Enrique Peña Nieto (México), Felipe Calderón (México), los hermanos Fidel y Raúl Castro (Cuba), Lula da Silva (Brasil) y Sebastián Piñera (Chile). Y hasta del Nobel de Literatura Gabriel García Márquez las usa con frecuencia.

Por su parte, el actual presidente salvadoreño parece tener firme la idea de vestir a los funcionarios públicos con guayaberas, sin excluir a las mujeres.

“(A las mujeres) les vamos a pedir que se pongan guayaberas también, o una guayabera diseñada para una mujer”, declaró Funes esta semana.