En la fecha 21 del torneo Clausura 2018 que se juega hoy completa, a las 3:15 p.m., el único de los 12 equipos que no se juega nada es el Isidro Metapán, ya que no tiene ninguna posibilidad de meterse a cuartos de final y su categoría está a salvo. Incluso si perdiera el partido de esta tarde y el de la fecha 22 para cerrar la fase regular.
Para los otros once equipos este puede ser un domingo singular, por eso será una jornada de dientes apretados. Sonsonate y Dragón son dos casos particulares con el descenso: son los más comprometidos, aunque también siguen en la lucha por clasificar a los cuartos de final. Sin embargo, el objetivo lo tienen claro y no es pasar a la siguiente ronda, sino que es continuar en el circuito mayor.
En los últimos partidos, cocoteros y mitológicos se complicaron más de la cuenta y, junto a Chalatenango, son los más comprometidos con dejar la Primera División.
Perder partidos claves con equipos directos con el descenso caló hondo y ahora están en crisis. Hoy tienen una de las dos últimas oportunidades para salvarse.
Sonso, por su parte, juega en el estadio Ana Mercedes Campos ante un Pasaquina que está con serias aspiraciones a meterse a la ronda de cuartos, cosa que los vuelve más peligrosos.
El equipo de Ramón Sánchez tiene claro el objetivo que es tratar de salir del sótano, aunque también depende de otros resultados. Todavía puede meterse a la fase de cuartos de final, pero de nada servirá si termina último en la acumulada, ya que perdería ese privilegio.
El descenso quedará definido esta misma tarde si pasan dos cosas: la primera es que Sonsonate pierda en su estadio ante los burros y la segunda, que los escupefuego le saquen el triunfo a los albos. Por ahora, estos dos equipos están a solo dos puntos de diferencia en la acumulada, todavía con seis en disputa.
Los escupefuego, entre tanto, tienen una salida a la cancha más difícil, porque visitan al líder Alianza, que llega en busca de cuidar la primera posición y de quien pague los platos rotos del jueves pasado, tras caer ante Santa Tecla.
Los duros del norte son el tercer comprometido con perder la categoría en la Liga Mayor, pues están a cinco puntos de los cocoteros y visitan al Metapán. Los jaguares están a la espera de que termine el certamen, uno de los más desastrosos en su historia, para empezar la planificación del Apertura 2018, siempre de la mano de Alberto Agustín Castillo.
Le tienen la medida
En esta jornada en la que se pueden definir muchas cosas, Águila y FAS jugarán el clásico nacional 237, esta vez en el estadio Barraza. Los tigrillos están clasificados desde hace ratos, pero no pierden la esperanza de quedar más arriba en la tabla del Clausura, ya que siguen con la posibilidad de terminar primeros, si Alianza y Santa Tecla fallan en los partidos que les restan.
Los emplumados juegan en un maltratado campo debido a que la noche del viernes hubo un concierto musical en el Barraza, y las condiciones de la cancha son pésimas, según mostró ayer en un video que publicó el delantero David Rugamas en su cuenta personal de Twitter.
Al margen de este inconveniente que afectará a los dos equipos, las estadísticas están en poder de los migueleños, ya que en la primera vuelta doblegaron a los santanecos en el Óscar Quiteño 1-0, en el debut de Miguel Aguilar Obando en el banquillo.
Además, ya son 14 partidos en los que los asociados no pueden derrotar a su archirrival. La última vez que lograron vencer a Águila fue en el Apertura 2015, cuando se impusieron con marcador de 2-1.
Los orientales necesitan de una victoria para sellar su boleto a los cuartos de final, además, esperan la reivindicación ante su afición, puesto que entre semana fueron goleados por el Audaz (3-1).
“Esperamos estar con buena actitud para encararlo a FAS de la mejor manera, vamos por la reivindicación de nosotros mismos y cumplirle a la afición. Conscientes de la gran responsabilidad, está claro: ante FAS es el partido que no debemos fallar, Águila está comprometido con su propia camisa. Es un partido especial para toda la institución, queremos cerrar de buena manera para entrar a lo grande a los cuartos de final”, externó el DT Miguel Aguilar.
El equipo negronaranja está con los mismos puntos que Firpo (27), a la espera de hacer, primero, su trabajo en el clásico nacional, y esperar a que los taurinos fallen, ya que ambos esperan quedarse con el cuarto lugar, lo cual les da ventaja deportiva en la siguiente ronda de cuartos.
A consolidarse
Firpo, con la categoría salvada prácticamente, visita al Audaz en el estadio Jiboa. Los toros, además, matemáticamente están casi clasificados, pero esperan seguir en la senda de la victoria para no dar ventaja al emplumado.
Limeño, por su parte, después de conseguir una gran victoria ante el Chalatenango en el Gregorio Martínez, también espera sellar el boleto en casa, pero recibe a Tecla, que no quiere soltar el segundo puesto, y aún sueña con arrebatarle el primero al Alianza.