Saltar la cuerda ya no es solo cosa de niños. En los últimos años, este ejercicio ha resurgido con fuerza en las rutinas de entrenamiento físico de todo el mundo, no solo por su efectividad, sino por lo accesible que resulta para cualquier persona. Es una forma simple de ejercitarse, ideal para quienes tienen poco tiempo o no pueden asistir a un gimnasio, como muchas madres que equilibran la crianza, el trabajo y el hogar.
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Además, no se necesita más que una cuerda y calzado cómodo para obtener una rutina completa que favorezca el cuerpo, la mente y el estado de ánimo. Organizaciones médicas y medios especializados han destacado los múltiples beneficios de esta práctica. Aquí te explicamos por qué deberías considerar incluirla en tu vida diaria.
Mejora la salud cardiovascular

El principal beneficio de saltar la cuerda es su impacto positivo en la salud del corazón. Al tratarse de un ejercicio aeróbico, implica un aumento del ritmo cardíaco que ayuda a fortalecer tanto el corazón como los pulmones. Esto, a su vez, mejora la circulación sanguínea, regula la presión arterial y reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Realizar al menos 150 minutos de actividad aeróbica moderada a la semana —como saltar la cuerda— puede prevenir la hipertensión, reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y aumentar el colesterol bueno (HDL). Para quienes tienen antecedentes familiares de problemas cardíacos o simplemente desean mejorar su capacidad física, este ejercicio puede ser una gran herramienta preventiva.
Otra ventaja es que no se requiere una gran cantidad de tiempo para ver resultados. Saltar la cuerda durante 10 a 15 minutos puede ofrecer los mismos beneficios cardiovasculares que correr una distancia corta, pero con menor impacto sobre las articulaciones si se realiza correctamente y con el calzado adecuado.
Quema calorías y ayuda a controlar el peso

Uno de los motivos más comunes por los que muchas personas —en especial las madres que recién han tenido hijos— buscan incorporar el ejercicio a sus rutinas es el control del peso. Saltar la cuerda es una opción sumamente eficiente para quemar calorías. Según datos, una persona de aproximadamente 70 kilos puede quemar entre 120 y 150 calorías en solo 10 minutos de saltos continuos.
Si se compara con otros ejercicios cardiovasculares, la cuerda es tan efectiva como correr, nadar o andar en bicicleta, pero tiene la ventaja de requerir menos espacio y tiempo. Esto la convierte en una excelente alternativa para quienes desean perder peso sin acudir al gimnasio.
Pero más allá de la pérdida de peso, este ejercicio mejora el metabolismo basal (la cantidad de calorías que el cuerpo quema en reposo), lo cual es esencial para mantener un peso saludable a largo plazo.
Fortalece piernas, glúteos y abdomen

Aunque parezca que saltar la cuerda es solo cuestión de brincar, en realidad involucra una gran cantidad de músculos. Las piernas, glúteos, abdomen, espalda baja e incluso los brazos se ven comprometidos durante cada salto.
Este trabajo muscular tiene dos efectos positivos: en primer lugar, el fortalecimiento progresivo de las extremidades inferiores, lo cual mejora la postura, la resistencia y el equilibrio corporal. En segundo lugar, contribuye al tono muscular, algo que muchas personas buscan no solo por estética sino por salud.
Mantener una musculatura fuerte es clave para prevenir lesiones, reducir dolores articulares y mantener una buena movilidad, especialmente con el paso de los años. Para las madres que cargan niños pequeños, bolsas de compras o realizan muchas tareas físicas en casa, fortalecer estos grupos musculares puede marcar una gran diferencia.
Mejora la coordinación y el equilibrio

Uno de los beneficios menos conocidos de saltar la cuerda es el desarrollo de la coordinación motora. Al coordinar los movimientos de brazos y piernas con un ritmo constante, el cuerpo aprende a sincronizar sus acciones de manera más eficiente.
Esto no solo ayuda en la práctica de otros deportes, sino que también mejora la agilidad y el tiempo de reacción en situaciones cotidianas. Para personas mayores, por ejemplo, esta mejora en el equilibrio puede reducir el riesgo de caídas.
El equilibrio es una de las capacidades físicas más importantes para mantener la independencia en la adultez mayor. Por eso, empezar a trabajarla desde edades tempranas —con ejercicios como la cuerda— es una excelente inversión en la salud futura.
Reduce el estrés y mejora el estado de ánimo

El ejercicio físico también es una herramienta poderosa para cuidar la salud mental. Saltar la cuerda, al igual que otras actividades aeróbicas, estimula la liberación de endorfinas, conocidas como las “hormonas de la felicidad”. Estas sustancias naturales ayudan a reducir el estrés, combatir la ansiedad y mejorar el ánimo de manera general.
Un estudio publicado por la “Mayo Clinic” explica que el ejercicio regular puede tener efectos comparables a los de algunos tratamientos médicos en personas con depresión leve a moderada. Además, hacer actividad física de forma regular favorece el descanso nocturno, reduce la fatiga y mejora la autoestima.
Para muchas madres que lidian con altos niveles de estrés por la crianza, el trabajo y la vida diaria, contar con unos minutos al día para saltar la cuerda puede significar una mejora significativa en su bienestar emocional.
¿Qué debes tener en cuenta antes de empezar?
Antes de incluir este ejercicio en tu rutina diaria, es importante considerar algunas recomendaciones para evitar lesiones y sacarle el mayor provecho posible. Es importante empezar poco a poco, con sesiones de entre 5 y 10 minutos, e ir aumentando la intensidad gradualmente. Usar calzado deportivo con buen soporte es fundamental, así como elegir una superficie adecuada: evita pisos muy duros como cemento para no sobrecargar las rodillas y tobillos.
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También se recomienda hacer un calentamiento previo con estiramientos suaves, y estirar nuevamente después de la sesión para evitar calambres o rigidez muscular. Si tienes problemas articulares, cardiovasculares o estás embarazada, lo ideal es consultar con un médico antes de iniciar esta práctica.
Este artículo fue elaborado con asistencia de IA
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