Residentes del caserío Arrollo Blanco, cantón El Cerrito, Nahuizalco, Sonsonate, denunciaron el hallazgo de perros muertos presuntamente porque una persona les dio comida que llevaba algún tipo de veneno.
Fueron cuatro canes criollos los encontrados muertos en una área de sesenta metros a la redonda.
Los propietarios de los animales los encontraron sin vida el jueves en la mañana y pidieron a las autoridades correspondientes, como el Instituto de Bienestar Animal, que investiguen el caso y encuentren a los responsables del hecho.
Dos perros eran de un solo dueño, dijeron las personas que denunciaron el hecho.
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“Sospechamos que fue un señor, un vecino, y pedimos a las autoridades que investigue”, expresó una residente del caserío, Marta Lipe.
Otra teoría de los lugareños es que la muerte de los perros sea responsabilidad de un delincuente que pretende cometer algún delito ya que “cuidaban las calles”.
Presuntamente los perros recibieron carne con veneno.
Las personas señalaron que es la primera ocasión que sucede esta situación en la comunidad. Se mostraron molestos por “el mal corazón” del responsable.
A inicio de semana, el Instituto de Bienestar Animal y la alcaldía de San Francisco Menéndez, Ahuachapán, rescataron a un perro que tenía al menos dos meses de abandono y que estuvo por cuatro días en el barrio El Centro, soportando las inclemencias del tiempo.
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Fue diagnosticado con deshidratación severa, anemia, lesiones y presencia de pulgas.