Seis perros fueron atrapados por la alcaldía de San Francisco Menéndez, en Ahuachapán, y puestos en un resguardo, debido a que ganaderos del caserío Santa Rita, cantón La Ceiba, afirmaron que los animales mataron a diecisiete terneros para comerse las vísceras.
Los ganaderos se estaban organizando para matar a los canes y dejar de tener pérdidas económicas; sin embargo, el Instituto de Bienestar Animal y el delegado contravencional de la alcaldía, William Coreas, les advirtieron, en una reunión, que podían ser detenidos ya que no pueden cometer este tipo de acciones.
Coreas señaló que el 29 y 30 de septiembre recibió dos denuncias donde le exponían la situación, por lo que contactaron al propietario de la hacienda donde se mantenían los perros para entablar una negociación.
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Este último mostró disponibilidad de capturar a los perros; además, señaló que no eran de su propiedad sino que colonos que habían dejado de laborar con él, los abandonaron.
Los perros se acostumbraron a comer vísceras de ganado debido a que eran alimentados con resto de reses destazadas.
Por ello, la manada mataba a los terneros y únicamente se comían las vísceras y tripas. El resto de los animales eran dejados intactos.
“Hacían un hoyo por el estómago, se comían todas las vísceras. Hubo ganaderos que perdieron en un lapso de 24 horas, ocho terneros; otro, tres. Se hicieron un total de diecisiete terneros, según manifestaron los mismos ganaderos. A raíz de eso, nosotros en coordinación con el Instituto de Bienestar Animal le dimos seguimiento a diario a ese caso”, expresó el delegado contravencional.
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Desde las 9:00 de la mañana hasta las 5:00 de la tarde, el propietario de la hacienda se ocultó para vigilar que uno de los perros ingresara a la vivienda para cerrar la puerta.
Dicho perro escapaba al observar personas porque los ganaderos incluso ya le habían disparado con la intención de matarlo.
Los seis perros fueron trasladados a un resguardo en otra comunidad del municipio a la espera del Instituto de Bienestar Animal. La intención es rehabilitar a la manada, que socialicen y luego darlos en adopción.
Las autoridades esperan que ya no se registren muertes de terneros. Aunque en la zona también hay coyotes porque se ubica la zona de Santa Rita, que es una Área Natural Protegida (ANP).
Los seis perros no se muestran agresivos.