Tras una sesión de oración en presencia del rey, de la reina consorte y de miembros de la familia real, el féretro de la reina Isabel II fue trasladado en procesión por el centro de Londres desde el Palacio de Buckingham al Palacio de Westminster a partir de las 14H22 hora local.
Se tiene programado que la célebre campana del Big Ben repicará cada sesenta segundos y se dispararán 38 salvas de cañones desde Hyde Park, una por minuto.
Carlos III, junto a sus hermanos Ana, Andrés y Eduardo, así como sus hijos Guillermo y Enrique, acompañarán a pie el féretro de la reina. Las esposas de estos últimos, Catalina y Meghan, y la reina consorte Camila irán detrás en coche.
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Los restos de la monarca más longeva del Reino Unido llegarán a las 15H00 (14H00 GMT) a Westminster Hall, donde permanecerán hasta el 19 de septiembre en un catafalco color púrpura.
Donde los británicos podrán acudir a presentar sus respetos de forma ininterrumpida a partir de las 17H00 del miércoles hasta el lunes a las 06H30. Se espera la llegada de miles de personas y colas kilométricas, día y noche.
Programación
Viernes, 16 de septiembre, se espera que el rey y la reina consorte viajan a Gales, donde recibirán el pésame de las autoridades y participarán en una ceremonia en la catedral de Llandaff, completando así su gira por las cuatro naciones del Reino Unido.
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Posteriormente el domingo 18 de septiembre, se guardará un minuto de silencio en Reino Unido para honrar la vida de la reina y sus servicios al país. Lunes 19 el féretro de la monarca se trasladará a la Abadía de Westminster para un funeral de Estado a partir de las 11H00 (10H00 GMT).
Después del funeral, el ataúd se trasladará a Windsor, donde tendrá lugar un servicio religioso antes de un entierro privado en la capilla de San Jorge.
La reina será inhumada en esa capilla junto a su esposo, el príncipe Felipe. Allí reposan también las cenizas de su hermana, la princesa Margarita, y los restos de su madre Isabel y de su padre, el rey Jorge VI.