Nicaragua elegirá a su Miss Universo en el exilio, en Miami

La franquicia Miss Universo Nicaragua anunció que coronará por primera vez a su representante en el exilio. La elección se celebrará el próximo jueves en Miami, en el teatro James L. Knight Center, donde trece candidatas competirán por la banda que les permitirá aspirar a la corona internacional en noviembre en Tailandia.

La decisión marca un giro histórico para el certamen nicaragüense, tras las acusaciones del Gobierno de Daniel Ortega contra la anterior directora, Karen Celebertti, señalada en 2023 de presuntos delitos de conspiración y traición a la patria. 

Su salida obligó a la organización a reorganizarse fuera de Nicaragua, siguiendo una ruta parecida a la que ya emprendió Cuba, que desde hace dos años elige en Miami a su candidata para Miss Universo.

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Un certamen de Miss Universo marcado por el exilio

La competencia nicaragüense se desarrollará en un contexto inédito. James L. Knight Center, un escenario emblemático de espectáculos internacionales en Miami, servirá como punto de encuentro para la diáspora nicaragüense, que podrá acompañar a las aspirantes.

El equipo de preparación de las candidatas ha estado liderado por el estilista venezolano Juan Bautista, con trayectoria en concursos de belleza. La gala será conducida por la ex Miss Universo Zuleyka Rivera, de Puerto Rico, junto al periodista nicaragüense Iván Taylor, y contará con la participación artística de Noel Schajris, vocalista del dúo Sin Bandera.

La experiencia de Cuba resulta un referente cercano. Tras 57 años sin presencia en el concurso, la isla retomó su participación con elecciones realizadas en el sur de Florida. Este año, la representante cubana es Lina Luaces, sobrina de los músicos Emilio y Gloria Estefan, seleccionada entre aspirantes en el exilio.

El legado de la ex Miss Universo Sheynnis Palacios y el impacto político

El triunfo de Sheynnis Palacios en 2023, primera Miss Universo nicaragüense, provocó celebraciones masivas en varias ciudades del país. Las imágenes de la población en las calles fueron interpretadas por analistas como una muestra de descontento social frente al Gobierno de Ortega, lo que evidenció el peso simbólico de este tipo de certámenes.

Dicho certamen en 2023 fue realizado en el Gimnasio Nacional Adolfo Pineda, en San Salvador.

Ese mismo contexto ocurrido hace dos años marcó la ruptura definitiva entre el evento de belleza y las autoridades. Ahora, con la coronación en Miami, Miss Universo Nicaragua busca reinventarse en un escenario distinto, pero con el mismo objetivo: mantener viva una tradición cultural y proyectar a nuevas voces femeninas en plataformas internacionales.

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Un espacio de representación para la diáspora

Para muchos nicaragüenses que residen en el extranjero, la realización del concurso en Miami representa algo más que un espectáculo. La coronación en el exilio se percibe como un gesto de resistencia cultural y una oportunidad de mantener el vínculo con las raíces.

Aunque las circunstancias políticas condicionaron el traslado, los organizadores aseguran que la esencia del certamen sigue intacta: “destacar el talento, la disciplina y la capacidad de liderazgo de las participantes”. En esa línea, la elección en Florida se perfila como un evento que trasciende la pasarela, al convertirse en un símbolo de unidad para la comunidad migrante.

El próximo capítulo se escribirá en noviembre en Tailandia, cuando la nueva representante de Nicaragua busque repetir el histórico logro de Palacios. Entretanto, la gala en Miami será el escenario de un momento clave para una franquicia que, aún desde el exilio, quiere seguir brillando en el escenario mundial.