Suben las exportaciones, pero cae la maquila en primeros cinco meses de 2025

Las camisetas y los suéteres hechos en El Salvador ya no tienen la demanda deseada en el exterior. Hasta hace unos años eran los principales productos de exportación, siendo Estados Unidos y Centroamérica los principales compradores. Solo en 2024, ambos productos superaron los $934 millones en exportación.

Sin embargo, desde hace unos cuatro años, estos artículos y el sector al que representan, la maquila, han ido en picada en cuanto a volumen e ingresos por exportaciones.

De acuerdo a datos del Banco Central de Reserva (BCR), ambos productos han mostrado caídas en su valor exportado: las camisetas disminuyeron un 19.3 % y los suéteres un 3.3 %. para los primeros cinco meses de 2025.

Cifras del BCR indican que el sector maquila en total exportó $36 millones menos de enero a mayo de 2025, pasando de $197.5 millones a $161.3 millones.

En relación a volumen, el rubro maquila pasó de 3,482,516 kilogramos exportados a 2,083,003 en el mismo periodo.

Solo en la categoría de prendas y complementos de vestir de punto, la exportación se redujo de $214.8 millones a $178.3 millones.

Lo anterior trae implicaciones para el sector ya que la maquila es clave para el país y genera miles de empleos. Datos del BCR indican que este sector aportó más del 80 % del total exportado a mayo de 2025; sin embargo, se ha visto una contracción en sus productos, en gran medida por los aranceles internacionales que han impactado a la industria. Ante ello, varias gremiales han solicitado al gobierno que abogue ante las autoridades de Estados Unidos para que exima al país de esas tarifas.

Estados Unidos- el principal socio comercial de El Salvador- impuso el pasado abril aranceles del 10% a los productos que ingresen a su territorio, lo que ya está impactando la balanza comercial.

A nivel regional, Estados Unidos sigue siendo el principal destino de las exportaciones salvadoreñas, representando alrededor del 30.6 % del total exportado entre enero y mayo, pero las ventas hacia ese país cayeron un 7.3% en los primeros cinco meses del año, debido siempre a las nuevas medidas arancelarias.

"Hemos observado que la exportación a EE.UU. ha bajado recientemente por el tema de los aranceles. Si los productos resultan más caros, la demanda va a bajar. Si hablamos de textiles y confección sí han bajado en el último mes", afirmó Silvia Cuéllar, presidenta de la Corporación de Exportadores de El Salvador (COEXPORT), durante una entrevista televisiva la semana pasada.

Esta caída ha sido recurrente en los últimos tres años, ya que según datos del BCR, la maquila pasó de exportar $360 millones en 2022 a $279.8 en 2023 y se redujo nuevamente a $197.5 en 2024, una tendencia que sigue a la baja.

A eso se suman los problemas internos que han tenido los exportadores, debido a los atascos en el puerto de Acajutla, lo cual les ha causado atrasos en sus entregas de mercaderías y costos adicionales por buscar otras alternativas.

Exportaciones marcan récord en mayo, pero importaciones aumentan

El país sigue comprando más y vendiendo menos—con un déficit superior a $4,400 millones en lo que va del año-lo que implica que El Salvador sigue comprando del exterior más del doble de lo que logra vender.

Si bien los resultados muestran un dinamismo positivo en la actividad exportadora, con un crecimiento del 5.4 por ciento de enero a mayo de 2025, las importaciones crecieron el doble, lo que deja al país con un déficit comercial considerable.

Estas últimas totalizaron $1,553.9 millones solo en mayo y suman $7,262.8 millones en los primeros cinco meses del año, con un crecimiento del 10.5 %, en comparación con el mismo período de 2024.

El mayor peso de las importaciones recae en bienes de consumo, con un crecimiento del 13.4%, bienes de capital (como maquinaria) con un alza de 11.5% y materias primas para la industria, principalmente de China y EE.UU.

En cambio, el sector textil, los plásticos y electrónicos, son sus principales rubros importados, siendo también Estados Unidos su principal socio.

Aunque las exportaciones muestran crecimiento, el déficit comercial se mantiene. Al cierre de 2024, el déficit superaba los $9,521 millones, un desequilibrio que muestra una fuerte dependencia de los mercados extranjeros y una escasa productividad.

Los analistas económicos han destacado la importancia de seguir impulsando la producción local, mejorar la competitividad y diversificar los mercados de destino para reducir esta brecha.