Cualquier padre de familia ha tenido que enfrentar un berrinche o un comportamiento incontrolable de su hijo en un lugar público, y es difícil saber cómo actuar adecuadamente. Hasta cierto punto es normal, ya que parte de la regulación emocional es importante que los niños aprenda a dominar el auto control, pero cómo identificar un comportamiento agresivo o violento en un niño y en qué forma ayudarle, son las grandes preguntas.
Según la psicóloga pediatra de Cleveland Clinic, Emily Mudd, “en general, esperamos que los niños pequeños experimenten algunos comportamientos agresivos. En esta etapa, los niños tienden a recurrir a las expresiones físicas de su frustración, simplemente porque todavía no tienen las habilidades de lenguaje para expresarse. Por ejemplo, empujar a un compañero en el patio de recreo podría considerarse típico. No necesariamente lo llamaríamos agresión a menos que fuera parte de un patrón “.
En este sentido, explica que alrededor de los 7 años, las expresiones físicas de agresión deberían disminuir, en caso no suceda es importante prestar atención y buscar ayuda. Según la experta existen seis formas de lidiar con dichos comportamientos:
1. Mantener la calma
“Cuando un niño expresa mucha emoción y los padres se encuentran con más emoción, puede aumentar la agresión del niño. En su lugar, trata de modelar la regulación emocional para tu hijo”, dice la psicóloga pediatra.
2.No te rindas a las rabietas o al comportamiento agresivo
Si tu hijo tiene una rabieta en el super porque quiere un cereal en particular, no te des por vencido y no lo compres. Esto es gratificante, y refuerza el comportamiento inapropiado.
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Entregarle una tableta en medio de un berrinche no es la solución para que el niño se calme.
3. Recompensa el buen comportamiento
No necesariamente tendría que hacer algo fuera de lo común. La experta ejemplifica que si a la hora de la cena está libre de problemas (malos comportamientos), se le puede decir: “Me gusta mucho cómo actuaste en la cena”. “En este caso, las golosinas y los premios pueden esperar, ya que el reconocimiento y la alabanza son poderosos por sí solos”, asegura la experta.
4. Enséñale a expresar sus emociones
Ayuda a los niños a expresarse mencionando sus emociones. Por ejemplo: “Puedo decir que está realmente enojado en este momento”. Esto valida lo que su hijo siente y alienta la expresión verbal. en lugar de física.
5. Identifica qué lo hace agresivo
Es importante conocer patrones e identificar factores que desencadenan dichos comportamientos, por ejemplo si hace berrinches antes de la escuela, lo mejor es formar la rutina matutina. “Divida las tareas en pasos simples y emita advertencias de tiempo, como “Nos vamos en 10 minutos”. Establece metas, como llegar a la escuela a tiempo cuatro días de cada cinco días. Luego recompensa a tu hijo cuando cumpla con esos objetivos”, sugiere.
6. Elije recompensas apropiadas
Olvídate de los premios materiales o económicos, es mejor premiarlos con media hora de tiempo especial con los padres o eligiendo el menú de la cena para la familia.
Las estrategias antes mencionadas serán muy útiles para ayudar a tu hijo en el autocontrol, en caso la situación no mejore, lo mejor es visitar un especialista para resolver el problema.