Durante las vacaciones es muy común que las familias salgan a compartir uno o varios días de verano para olvidarse de las exuberantes jornadas de trabajo y de cualquier actividad rutinaria, porque no hay nada mejor que darse un chapuzón en aguas refrescantes o salir a caminar por rutas turísticas rodeadas de vegetación.
En efecto las casas quedan solas y te genera preocupación la idea que en la tuya haya un robo, un incendio, daños de responsabilidad civil o cualquier otro percance desagradable que pueda acontecer.
Aunque esas cosas parecieran imposible de evitarlas, toma en cuenta los siguientes consejos y minimiza las probabilidades de que sucedan para disfrutar tus vacaciones sin preocupación.
1. Lo más importante es evitar que los amigos de lo ajeno piensen que la casa está sola, por eso deja una luz encendida en el patio o en la sala para simular que hay alguien dentro; pero evita el consumo excesivo de energía con focos ahorrativos o con instalación de un sistema que los active en la noche.
2. Asegúrate de cerrar bien las puertas u otro punto de acceso para que nadie que no tenga la llave de tu casa pueda entrar; considera necesario dejar entreabierta las ventanas, para que los hurtadores no identifiquen de manera rápida que tu inmueble está solo.
3. La refrigeradora o muebles de cocina es otro punto a considerar; antes de irte bota toda la comida perecedera, considerando tus días afuera, para que no se produzcan insectos o al regresar percibas malos olores por descomposición de algún alimento.