Puedes ser la persona más limpia del mundo, pero posiblemente estás viviendo rodeado de miles de virus y bacterias si olvidas limpiar ciertos objetos o dispositivos de uso doméstico diario, como las toallas de la cocina y los interruptores de luz, por ejemplo.
A continuación te decimos qué otros objetos debes limpiar para un ambiente más limpio y libre de gérmenes.
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1. El control remoto. Este es uno de los objetos que más se utilizan en los hogares y que literalmente pasa por varias manos, de ahí que pueda acumular una gran cantidad de virus y bacterias. De hecho una publicación del portal rd.com asegura que investigadores de la Universidad de Arizona encontraron que los controles remotos albergan más gérmenes que muchos otros elementos comunes en las habitaciones de los hospitales. Por lo mismo sugieren que los limpies a fondo al menos una vez al mes con una toallita antibacteriana.
2. Interruptores de luz. ¿Qué es lo primero que haces cuando entras a una habitación o al baño? Seguramente enciendes la luz y la apagas al salir. Y claro, los interruptores de luz son otro lugar donde las manos van con frecuencia, pero los desinfectantes no son visitantes frecuentes.
Un estudio de la Universidad de Houston descubrió que los dedos sucios convierten los interruptores de luz de lugares públicos y del hogar en los accesorios más contaminados con gérmenes. En los hoteles, los interruptores de las lámparas de noche presentan un alto riesgo de infección, indica el sitio onhealth.com.
Si lo piensas bien, la misma manipulación sufren los picaportes y las chapas de las puertas, así que para estar seguro en casa, límpialos una vez a la semana. En sitios públicos, intenta usar los codos en lugar de los dedos o simplemente lavarse las manos luego de usarlos.
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3. El cepillo del baño. Aunque no es el objeto más limpio, el cepillo con el que limpias el baño tampoco es el que más contaminado dectu casa. Esto porque el limpiador de inodoros también suele desinfectar el cepillo.
Sin embargo, el mango de este y el recipiente en el que se asienta, pueden ser verdaderos pozos de bacterias. Así que cuando limpies el baño, al final, asegúrate de desinfectar todas las superficies del cepillo incluyendo el recipiente.
4. Los paños de la cocina. Este elemento esencial de la cocina atrapa humedad, aceites y grasas y por supuesto bacterias, que los hace propensos a adquirir un olor extraño si no los lavas con frecuencia, asegura la revista Eating Well. Para evitar esto lávalos después de cada uso con jabón para platos y agua caliente, y déjalos secar. Cada tanto, dales un buen enjuague en la lavadora de ser posible con agua caliente y separados de otras prendas.
5. El timón del carro. ¿Sabías que este puede estar más sucio que un baño público? Según el portal rd.com, investigadores de la Universidad Queen Mary de Londres analizaron un volante y encontraron 700 bacterias por pulgada cuadrada, casi nueve veces más de lo que encontraron en los asientos de los baños públicos.
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Si lo piensas esto es lo primero que tus manos tocan an entrar a tu carro, además de que muchas personas comen, beben y se maquillan mientras conducen. Para evitar sorpresas desagradables mantén un paquete de toallitas desinfectantes en tu carro y limpia regularmente el volante, la perilla de la palanca de cambios, los botones de radio y las manijas.