¿Sabes qué es el síndrome de la mujer agotada?

Esta condición, también conocida como TATT (Tired all the time), la experimentan muchas personas que viven agotamiento extremo por las diferentes responsabilidades y exigencias que deben cumplir. Un cambio de mentalidad y adoptar nuevos hábitos ayudarían a enfocar la energía y a bajar el estrés cotidiano.

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Muchas mujeres sufren de esta condición. / Foto Por EDH / Shutterstock

Por Diana Orantes

2020-06-05 9:30:08

La cuarentena que se vive en muchos países ha obligado aceptar una nueva forma de vida, donde la casa es el escenario familiar y laboral.

Aunque hombres y mujeres compartan las mismas responsabilidades, un estudio realizado por el Departamento de Sociología y Antropología Social de la Universidad de Valencia, confirmó que la carga mental y organizativa recae sobre las mujeres y raras veces es compartida con el hombre. Por ello, muchas se sienten más agobiadas y agotadas ahora que cuando salían a trabajar.

La situación se pone más estresante cuando hay niños en casa.

La asesora en liderazgo personal, Mónica García, apuntó que las mamás hacen malabarismos para coordinar y dedicar tiempo a todas las partes de su vida, renunciando a darse tiempo a sí mismas.

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“Madrugando para poder sacar adelante las horas de trabajo, conectadas continuamente a sus correos profesionales, mientras educan, cuidan y gestionan las necesidades de la casa”, detalló la motivadora.

Después de meses llevando esta carga es natural que se acumule el desgaste, porque hubo altos niveles de adrenalina para rendir como se debe sin bajar la guardia y “el bajón al que están expuestas a nivel físico y anímico es tremendo. Es lo que se le conoce como cansancio mental”, sostuvo García.

Como resultado una mujer experimenta mal humor crónico y mucho agotamiento.

De ahí se origina el síndrome de la mujer agotada, poco visibilizado en la medicina, pero que en países como Inglaterra es tratado y se diagnostica bajo el nombre de TATT (Tired all the time).

Este problema se puede tratar en casa poco a poco y constantemente. La clave es gestionar la energía. Aquí hay seis cosas funcionales que toda mujer multitarea puede hacer para sobrevivir al confinamiento.

1. Dormir, dormir, dormir
El sueño no debe ser negociable. Si piensas que te vas a acostar más tarde o te vas a levantar más temprano para terminar con una responsabilidad estás desequilibrando tus hábitos. “De hecho, que tardes más o menos en una tarea, al igual que la calidad de esta no depende del tiempo que le dedicas, tanto como de la calidad de atención”, expresó Mónica García. Otro error es pensar que dormir es una pérdida de tiempo, porqué en materia de salud es importante para reponernos, ya que hace una limpieza en el organismo y lo renueva. La coach sugirió bajar el ritmo de actividad una o dos horas antes de acostarse. Evita conversar o tratar de solucionar problemas laborales durante el descanso o revisar tu dispositivo. Al dormir procura bajar la intensidad de la luz o que el lugar esté completamente oscuro.

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2. No te lleves al límite
“Es común seguir haciendo cosas precisamente hasta que no podemos más, llevando nuestro cuerpo a un límite del que es más difícil recuperarse”, subrayó la coach.
Para renovarte durante el día estírate de forma regular, toma mucha agua e ingiere alimentos que te brinden energía, completa de forma intencionada una actividad antes de pasar a otra o haz un par de respiraciones.

3. Una cosa a la vez
Enfócate en una actividad a la vez porque dividir la atención es un desgaste de energía. García le llama “trabajar en serie”: termina una tarea y comienza otra, y así sucesivamente para que solo gastes la energía necesaria y produzcas un efecto de satisfacción al ver con qué orden y ligereza avanzas. Para que esto funcione elimina todas las distracciones posibles y recuerda no tomar demasiadas decisiones en un solo día, porque al final de la jornada te tomará más tiempo revisarlas.

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4. Separa lo que te conviene
Cuando recuerdas la cantidad de obligaciones que tienes, automáticamente tus ánimos se van al suelo o te animas a dar más de ti misma. “Cuando pensamos en lo que vamos a hacer como en una obligación es posible despertar la resistencia a hacer algo sobre lo que no tengo elección”, dijo García. En tal caso la coach sugirió pasar de la obligación a la elección y pensar por qué quieres hacerlo y qué beneficio te ofrece, así reducirás el nivel de resistencia ante muchas actividades cotidianas.

5. Háblate con amor
Un error fatal es tener conflictos con uno mismo. A veces la auto exigencia y el bajo auto reconocimiento que se gestan en los pensamientos debilitan y te pueden hacer sentir mal, inútil e improductiva. Presta atención a cómo te tratas, cómo te piensas y te hablas. Solo si reconoces tus capacidades y límites vas a tener ánimos, hasta para pensar en lo grandiosa que eres. Date tiempo para escucharte, una palabra de ánimo, mírate guapa y capaz.

6. Deja lo que no sirve
Elige bien con qué información, noticias, recuerdos y conversaciones te quedas. “No dediques tu tiempo a aquello que se sale de tu control, que despierta estados de impotencia o frustración”, aconsejó la motivadora. Una buena solución es mantenerte en tu círculo de influencia, es decir con aquellas personas que conoces, para evitar estrés innecesario y acumulado.