¿Hace cuánto cambiaste (y lavaste) tus sábanas? Tu salud peligra si no lo haces con frecuencia
A simple vista quizá no lo notes, pero junto a ti pueden descansar ácaros, hongos, moho, partículas de caspa de tus mascotas y restos de maquillaje que podrían afectar tu salud. ¿Sabes hacer esta limpieza de forma adecuada?
Para muchos, la tarea de lavar la ropa no es la más agradable, y cuando se trata de las sábanas o cobertores mucho menos, sobre todo si debe hacerse a mano. De hecho, muchos lo hacen hasta que el cesto desborda de prendas o hasta que ya ni siquiera recuerdan cuándo fue la última vez que sintieron en su cama el olor de la ropa fragante y limpia.
La National Sleep Foundation de los Estados Unidos realizó una encuesta nacional en aquella nación, en la que el 91% afirmó que cambiaba sus sábanas cada dos semanas. Y aunque eso se toma como una regla general, para muchos expertos lo ideal son los lavados semanales, según indica una publicación del portal healthline.com.
Si se analiza bien, en el resto de la casa y con el afán de mantener la pulcritud y limpieza, muchos están atentos a lavar cada plato que se vaya usando o a eliminar cualquier rastro de polvo de los muebles. Sin embargo por la noche caen rendidos sobre las sábanas con muchos días de uso, donde se han acumulado miles de células muertas, ácaros del polvo e incluso materia fecal si duermen desnudos.
De hecho, el lavado más frecuente de esta ropa es necesario cuando la persona padece asma, es alérgica o sensible al polvo. Lo mismo si padece alguna infección o una lesión que haga contacto con sus sábanas o almohadas, indica healthline.com.