Así deben ser los cuidados para los pacientes de esclerosis ante la pandemia

Este 21 de junio se celebra el Día Mundial de la lucha contra la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), una enfermedad que debilita los músculos del pecho, representando una complicación aún más fuerte frente al COVID-19.

descripción de la imagen
Foto Por EDH-Shutterstock

Por Maricris De la o / Clínica Mayo

2020-06-21 5:20:05

La Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) es una enfermedad que afecta las neuronas en el cerebro, el tronco cerebral y la médula espinal que controlan el movimiento de los músculos voluntarios, razón por la que los pacientes tienen más riesgo de presentar problemas respiratorios graves por el COVID-19, dado que los músculos que participan en la respiración podrían ya no funcionar normalmente.

“Cuando alguien padece una afección que produce parálisis o debilita el diafragma o los músculos del pecho o el abdomen, posiblemente no pueda expulsar las secreciones pulmonares a través de la tos y tenga dificultad para inhalar y llenar los pulmones del oxígeno que luego se distribuye al resto del cuerpo. Si usted sufre una discapacidad física, este es el momento de tomar más precauciones para protegerse contra este virus tan peligroso”, explicó la doctora Kristin Garlanger, fisiatra de Clínica Mayo.

La doctora Garlanger indicó que para evitar enfermedades hay que actuar con diligencia y hacer lo siguiente:

• Mantenerse hidratado para que las secreciones pulmonares sean menos espesas.
• Comer una alimentación sana y bien balanceada para favorecer el sistema inmunitario.
• Practicar tanto la respiración profunda como los “ejercicios para toser”, o sea, aquellas maniobras controladas que ayudan a toser y despejar los pulmones.
• Cambiar de posición con frecuencia y valerse de la gravedad para despejar los pulmones.

Puedes leer: Conoce las 5 alteraciones en la piel que provoca el COVID-19 

A fin de protegerse uno mismo del COVID-19 y proteger a los demás, todos debemos cumplir con las siguientes pautas de las autoridades sanitarias:
• Lavarse las manos.
• Practicar la distancia social.
• Evitar tocarse la cara.
• Quedarse en casa en caso de enfermedad.

“A las personas con discapacidades físicas se les recomienda tomar más medidas de seguridad”, señaló Lisa Beck, profesional de práctica avanzada del Departamento de medicina física y rehabilitación de Clínica Mayo.

“Las pautas del CDC que hablan sobre mantener una distancia mínima de 1.80 metros con los demás son especialmente importantes cuando alguien usa silla de ruedas, porque la vulnerabilidad es mayor debido a que la cabeza queda más abajo de la de quienes están de pie y las gotitas que una persona infectada despide al toser, estornudar o hablar descienden hasta esa altura”, agregó Beck.

La doctora Garlanger y Lisa Beck ofrecen sugerencias respecto a la silla de ruedas, los planes para las personas que brindan cuidados y los dispositivos respiratorios.

Usuarios de sillas de ruedas 
Deben tomar en cuenta las siguientes recomendaciones:

Mantener una distancia mínima de 1.80 metros con los demás, dentro de lo posible.

Lavarse la cara, además de las manos, después de estar en público y de conversar directamente con otras personas.

Usar a lo largo del día una solución antibacteriana para limpiar las superficies que se tocan con más frecuencia, como las ruedas, los frenos y los aros de propulsión. Con las sillas de ruedas motorizadas, hay que usar una solución antibacteriana para limpiar la palanca de mando y los demás controles, los apoyabrazos, la bandeja o cualquier otra pieza tocable.

“Si usa otros aparatos de ayuda, como andadores o bastones, también límpielos regularmente con productos antibacterianos”, añadió Beck.

Cada 21 de junio se celebra el Día Mundial contra Esclerosis Lateral Amiotrófica, una iniciativa de concientización global. Foto EDH / Shutterstock

Personas con cuidadores
Las personas que cuentan con alguien para su cuidado deben tomar en cuenta las siguientes recomendaciones:

Solicitarle que use mascarilla cuando llegue a su casa a trabajar con usted.

Hacer que se lave las manos al llegar y cada vez que lo toque.

Pedirle que preste mucha atención para no tocarse la cara ni tocar la suya.

Solicitarle que se tome la temperatura antes de llegar.

Pedirle que no vaya a su casa si no se siente bien, lo que incluye síntomas como tos, fiebre de 38 grados o más, así como si sabe que estuvo expuesto a algún enfermo.

“Encontrar cuidadores adecuados para sus necesidades personales o las de sus mascotas puede resultar difícil de coordinar, pero es fundamental planificar anticipadamente y contar con alguien que pueda ayudar en caso de que la persona que lo cuida se enferme o no pueda ayudarle”, acotó Beck.

Podría interesarte: ¿Se puede experimentar la sintomatología del coronavirus sin estar contagiado?

Si la persona que habitualmente lo cuida no estuviera disponible:

Haga planes para tener otros cuidadores de respaldo y prepare a la persona en quien usted puede confiar ante una emergencia.

Asegúrese de poder obtener ayuda en caso de que alguna de las personas que lo cuida no se presente.

Encuentre a gente que le ayude con la compra o arregle para que le entreguen comida en casa.

Encuentre una manera de obtener los medicamentos y otros materiales de forma oportuna.

Recuerde que las mascotas también tienen necesidades. Asegúrese de tener suficiente cantidad de comida y haga arreglos para contar con un cuidador de respaldo para su animal de servicio o mascota.

“Algunas personas discapacitadas necesitan un respirador a diario. Por lo tanto, garantizar que las personas encargadas del cuidado cumplan estrictamente con las pautas de limpieza y manejo de esas máquinas permitirá proteger a las personas vulnerables a enfermedades respiratorias”, aseguró Beck.

Usuarios con respiradores y otros dispositivos de asistencia respiratoria
Estas son las indicaciones dada por las especialistas:

Limpiar y desinfectar el equipo médico según las instrucciones del fabricante.

Cambiar los filtros, según las recomendaciones del fabricante.

Lavarse las manos antes y después de manejar el respirador o a la persona.

Verificar que los cuidadores usen mascarilla o protección para los ojos al succionar secreciones.

Las profesionales de salud recordaron estar alertas ante las sospechas de coronavirus. “Si enferma y necesita atención médica, cuando llame a los proveedores de cuidados médicos o a los socorristas, usted o su cuidador tienen que mencionar la discapacidad y su efecto sobre el sistema respiratorio. De esa manera, ellos estarán mejor preparados para ayudarlo”, concluyó la doctora Garlanger.