Sorrento Therapeutics, con sede en San Diego, California, afirma que en pruebas de laboratorio su anticuerpo STI-1499 impidió que el coronavirus ingresara al 100 por ciento de las células humanas sanas, constituyendo un posible primer paso en la creación de un cóctel de medicamentos para combatir el COVID-19.
El STI-1499 es uno de los más de mil millones de anticuerpos que dicha compañía está desarrollando en colaboración con la Escuela de Medicina Mt Sinai en Nueva York en un esfuerzo por encontrar un tratamiento efectivo contra el virus.
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Estas proteínas inmunes en forma de Y se adhieren a la superficie de un virus y, si se agarran lo suficientemente fuerte en el punto justo, bloquean la infección.
Según el doctor Heny Ji, CEO de Sorrento, un coctel de anticuerpos podría actuar como un “escudo protector” para las células humanas, evitando que los virus ingresen a ellas.
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El investigador asevera que el anticuerpo bloquea el virus desde su puerta principal, el receptor ACE2, situado en la superficie de las células humanas.
“Esto pone sus brazos alrededor del virus. Envuelve el virus y lo saca del cuerpo. Cuando el anticuerpo impide que un virus ingrese a una célula humana, el virus no puede sobrevivir (…) Si no pueden ingresar a la celda, no pueden replicarse. Por lo tanto, significa que si evitamos que el virus llegue a la célula, el virus finalmente desaparece. El cuerpo elimina ese virus”, explicó el doctor Ji.
Sorrento Therapeutics cree que estos anticuerpos podrían ser una importante solución provisional antes de que se tenga una vacuna contra el COVID-19.
En un comunicado de prensa, Sorrento dijo que podría producir hasta 200,000 dosis del anticuerpo al mes, una línea de tiempo de producción que probablemente haría que el medicamento esté disponible meses antes de una vacuna COVID-19.
Sorrento cree que el STI-1499 podría funcionar como un tratamiento independiente o como parte de un coctel de anticuerpos que se dirigen a tres partes diferentes del virus. La esperanza es que sería más difícil para el coronavirus desarrollar resistencia a tres anticuerpos que a uno.
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El anticuerpo aún no se ha probado en personas, por lo que se desconoce cómo podría comportarse dentro del cuerpo y sus posibles efectos secundarios.
La compañía ha solicitado la aprobación de emergencia de la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA), pero aún no ha recibido la luz verde.