¿Cómo saber si padeces anemia?

Niños, adolescentes, mujeres en edad fértil y embarazadas son quienes más deben cuidarse para no desarrollarla

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El cansancio es uno de los síntomas de la anemia. / Foto Por Shutterstock.

Por Agencias/ K. García

2019-03-21 8:54:34

Dolor de cabeza, mareos, cansancio y manos heladas son algunos de los síntomas de la anemia. Está originada, generalmente, por la falta de hierro. De hecho, la Dra. Yusimit Ledesma sostiene que “al menos la mitad” de los casos de anemia se producen por la carencia de dicho elemento.

La enfermedad se desarrolla cuando el cuerpo no tiene suficientes glóbulos rojos sanos, los cuales suministran oxígeno a los tejidos del organismo.

“El hierro es necesario para producir hemoglobina, sustancia que permite almacenar y transportar oxígeno; padecer anemia ferropénica significa que no hay suficiente hierro, por lo tanto, los glóbulos rojos no pueden trabajar adecuadamente”, explica Ledesma.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el mundo hay más de 4 mil millones de personas con déficit de hierro, y se estima que un 15 por ciento de la población mundial padece anemia ferropénica. En los países desarrollados, se presenta con mayor frecuencia en lactantes y niños en edad preescolar, adolescentes, mujeres en edad fértil, embarazadas  y ancianos.

“Se da en cualquier edad y género, aunque los grupos más vulnerables son lactantes y niños, así como mujeres embarazadas y en edad reproductiva”, señala Ledesma.

La especialista plantea que cuando la anemia se desarrolla en el embarazo es por los nutrientes que requiere el bebé para su desarrollo; y es muy peligrosa. “En esta etapa, la anemia aumenta el riesgo de aborto involuntario, muerte fetal y bajo peso del neonato o nacimientos prematuros, incrementa los riesgos de mortalidad infantil, complicaciones en el parto por hemorragias y mayor riesgo de mortalidad”, agrega.

Aparte de los síntomas antes mencionados, Ledesma indica que los pacientes también pueden tener uñas quebradizas,  irritabilidad, cambios de humor y falta de concentración.

Además, puede haber tendencia a resfriarse, baja resistencia al frío, dificultad para respirar en actividades como subir escaleras y, en el caso de las mujeres, sangrado menstrual importante.

Lo bueno es que la condición es tratable y puede revertirse. Para evitarla, hay que comer verduras, hojas verdes y carne roja.