Si bien se utilizan con éxito desde hace algunos años en varios países del mundo, los biosimilares son una novedosa generación de medicamentos de los que poco se sabe en El Salvador, pero que suponen enormes beneficios para los pacientes.
Por ello, hoy te decimos qué son y algunas de las ventajas que ofrecen.
1. ¿Qué son los biosimilares?
De acuerdo con Eduardo Cioppi, portavoz de la compañía biotecnológica Mabxience, “los biosimilares son medicamentos biológicos que contienen una versión del principio activo del producto biológico original de referencia, una vez que este carece de derechos de exclusividad, frente al cual demuestra que las diferencias fisicoquímicas y biológicas no afectan a la calidad, eficacia y seguridad”.
En una publicación de El Mundo de España se afirma que estos se desarrollan con la finalidad de que sean altamente similares, pero nunca iguales. “Una copia exacta es imposible, de ahí que el término normativo utilizado en la Unión Europea para definir esta opción sea medicamentos biosimilares”, aclara.
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2. Son diferentes de los genéricos
Sí, un medicamento biosimilar es muy diferente a un genérico. Este último es una sustancia de síntesis química (‘pequeñas moléculas’) que se puede caracterizar de forma completa, de manera que es posible hacer copias exactas de los medicamentos originales de marca, cuya patente ha expirado.
Los biosimilares en cambio son sustancias complejas, de gran tamaño y sujetas a una variabilidad fisicoquímica inherente a todo proceso de producción, en el que participan seres vivos. Según Cioppi son versiones altamente similares del principio activo del producto de referencia, las cuales pueden presentar pequeñas diferencias con el medicamento de referencia que deben ser caracterizadas.
3. Enfermedades en las que se emplean
Los biosimilares están indicados en muchas enfermedades graves y que provocan una disminución importante en la calidad de vida de los enfermos que las padecen. Suelen ser enfermedades oncológicas, artritis reumatoide, enfermedades autoinmunes y digestivas.
4. Son igual de eficaces que otros tipo de fármacos
Los biosimilares se someten a exhaustivos exámenes que permiten garantizar su equivalencia en términos de eficacia, seguridad y calidad. Su principio activo es esencialmente la misma sustancia biológica que la del medicamento de referencia.
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5. Ofrecen muchas ventajas
El tratamiento de las enfermedades oncológicas o inmunológicas para las que están indicados los medicamentos originales suele ser muy costoso, y a veces inasumible para los propios pacientes o los sistemas públicos de salud. Por lo mismo el acceso a estos es limitado.
Los medicamentos biosimilares constituyen una alternativa coste-efectiva a sus medicamentos de referencia originales de marca, lo cual se traduce en un impacto positivo sobre todo en los pacientes al facilitarles el acceso a los tratamiento.
6. Están disponibles en El Salvador
Recientemente las autoridades de El Salvador han aprobado el Bevacizumab (indicado en algunos tipos de cáncer) y está en proceso la aprobación del Rituximab, también de uso oncológico.