Embellece tu rostro en cuarentena con estos exfoliantes caseros

En la rutina de cuidado facial, la exfoliación es un paso importante para el aprovechamiento de cremas, sueros y otros tratamientos de belleza. Ahora que estás en casa, ¿qué tal si preparas una con ingredientes de tu alacena?

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Aprovecha lo que tienes en casa para crear tu rutina de belleza semanal. Foto EDH / Shutterstock

Por Mireya Amaya

2020-05-01 4:30:36

Una rutina de belleza constante y con los pasos adecuados es la base de una buena piel. Es decir que, a diario debe estar compuesta por la limpieza, tonificación, hidratación y protección; además dependiendo del tipo de piel se debe exfoliar de una a dos veces por semana.

Esto último, aunque es muy importante, a menudo es pasado por alto por hombres y mujeres, que ignoran los beneficios que aporta al rostro.

De acuerdo con el portal loreal-paris.es, la exfoliación “ayuda a la regeneración celular de la piel tras retirar la acumulación de células muertas, limpia poros e impurezas”. Además indica que al hacer esto, la piel queda preparada para recibir y absorber cualquier principio activo que se le aplique, es decir que hay un mayor aprovechamiento de los serums, cremas u otro producto de uso facial.

El resultado final es una piel flexible, suave, visiblemente sana y brillante, donde además imperfecciones como marcas y cicatrices pueden disminuir. Ahí el porqué es preciso hacerla una vez a la semana.

La avena es una gran aliada de la belleza. Foto EDH / Shutterstock

Diferentes tipos
Según el blog Swirlster existen diferentes tipos de exfoliantes, entre los que puedes elegir el que se adecue mejor a tus necesidades:

– Los físicos que son los tradicionales y de uso común en la actualidad. En estos se utilizan cerdas y gránulos para una exfoliación manual. Son ideales para pieles que no se irritan con facilidad.

– También hay químicos o enzimáticos, formulados a base de enzimas o ácidos de origen natural. El portal kocochic.com explica que estos se aplican sin frotar y sin necesidad de dejar actuar, y suelen venir en forma de limpiadores, tónicos, serums e incluso cremas hidratantes. Estos limpian las capas más profundas de la piel, aunque con un proceso lento y suave, que los vuelve ideales para pieles sensibles.

De estos, los exfoliantes físicos son los más populares pues son más accesibles. Y es que incluso si no puedes comprarlo tienes la posibilidad de hacer uno en casa con productos de despensa. Para el caso es común el uso de leche, que contiene ácido láctico, un AHA (ácidos alfahidróxidos) natural que ayuda a exfoliar la piel mientras que su contenido de grasa la mantiene hidratada.

De la misma manera se utiliza la miel, que se destaca por sus propiedades antimicrobianas. Esta exfolia de forma suave y deja la piel tersa.

Si tienes un frasco de miel en casa, aprovéchalo también para refrescar tu rostro. Foto EDH / Sutterstock

Por otro lado, el azúcar morena o blanca también es muy usada, ya que sus gránulos pueden eliminar la suciedad a fondo, cuando se aplica con una ligera presión y movimientos suaves.

Igualmente se emplea el café molido que revitaliza la piel y la nutre, aportándole suavidad.
Prepara uno en casa. No necesitas gastar elevadas sumas de dinero para exfoliar tu rostro, solo date una vuelta por la cocina en busca de ingredientes sencillos y prepara alguno de los siguientes exfoliantes.

1. Azúcar morena y miel
Mezcla tres cucharadas de azúcar morena con la misma cantidad de miel o en una proporción que te permita obtener una pasta espesa. Úsala sobre el rostro húmedo con movimientos circulares suaves, déjalo por 30 minutos y lávate con agua. El azúcar eliminará la suciedad y la miel aportará humedad.

El café y el aceite de coco harán milagros en tu rostro. Foto EDH / Shutterstock

2. Leche y avena
En la licuadora, pulveriza de 3 a 4 cucharadas de avena para obtener un polvo más fino. En un tazón poco profundo, combina tres cucharadas de leche entera fría con la avena y frota la mezcla sobre la cara con movimientos circulares. Deja que repose durante una hora para que sus efectos exfoliantes físicos y químicos tengan efecto. Luego lávate con agua tibia.

3. Café y aceite de coco
Combina dos cucharadas de aceite de coco líquido con dos cucharadas de café molido finamente en polvo hasta obtener una pasta. Aplica sobre la cara con movimientos circulares suaves y deja reposar durante 20 minutos. Finalmente enjuaga con agua tibia. El café energiza la cara y proporciona el componente físico mientras que el aceite de coco lo cura y lo humedece.