Todo el mundo conoce a la princesa Diana. O mejor dicho, todo el mundo cree que la conoce. La princesa, que habría cumplido los 61 años este 2022, sigue siendo objeto de fascinación entre el público y los artistas. El drama psicológico surrealista de Pablo Larraín, “Spencer”, se desarrolla en unos inquietantes días durante la Navidad de 1991, cuando los problemas matrimoniales de la infeliz princesa Diana (Kristen Stewart) con el príncipe Carlos (Jack Farthing) apenas comenzaban a aflorar. Este drama cargado de intenciones se ha convertido en una película de Oscar según los expertos y es tal y como vemos en los primeros segundos de película, una “fábula sobre una tragedia real”.
Pero más allá de la cinematografía existe una historia entorno a la película (y la vida real) que merece ser contada; la historia desde la perspectiva de la moda. Y si el tema a tratar es el vestuario de la princesa Diana, hay un nombre que es imposible no mencionar: Jacqueline Durran. Puede que te suene porque es la artífice del mítico vestido verde de “Expiación”, además del vestuario de películas como “Orgullo y Prejuicio”, “Anna Karenina” y “Mujercitas” (por estas dos últimas se llevó el Oscar en su categoría).

Pablo Larraín plantea su película como una fábula, explorando el lado oscuro de la monarquía sin renunciar a la fantasía y la belleza que mantiene el sistema. La vida de Diana se desmorona, pero sigue teniendo el aspecto de una princesa y el lujo la rodea. Ese contraste es parte de la fuerza de la película. Para crear el vestuario de la alegórica princesa, era importante que Larraín, Durran y Stewart estuvieran alineados.
Kristen Stewart reveló a la prensa europea que cada paso en la producción de este largometraje fue una colaboración total. "Todos estábamos juntos en esto. Fue algo muy íntimo", afirmó la actriz. La legendaria casa de moda francesa Chanel puso sus archivos a disposición de la película, prestando y recreando piezas de aquella época para que Stewart las luciera en la pantalla. Semejante acceso permitió a la diseñadora de vestuario realzar la atmósfera de lujo creada por el director y el diseñador de producción.

No todos los looks son réplicas, sino más bien están inspirados en la princesa en base a un trabajo de investigación en el que no podían faltar looks de la casa Chanel, una de las favoritas de Lady Di y firma de la que Kristen Stewart es embajadora. "Esta colaboración dio a la película un estilo y glamour que no habríamos conseguido de otro modo", afirmó la actriz durante la gira de estreno de la película en 2021.
TAMBIÉN LEE: Bárbara de Regil y su mundo fitness llegan en El Salvador

Buena muestra de ello es el espectacular vestido de Chanel que luce la joven princesa en una cena. En un tono champán, con corte sirena y un escote palabra de honor, este vestido de organza pertenece a la colección Alta Costura Primavera-Verano 1988 y fue diseñado por Karl Lagerfeld. Se ha rehecho para la película y tiene más de 1000 horas de trabajo a sus espaldas y cinco costureras trabajando sin parar en el atelier de Chanel para duplicar los intrincados bordados de este look de alta costura. Aunque no es un vestido que cumple los protocolos reales de vestuario con el que viéramos a Lady Di, sí se inspira en uno de ellos y es el vestido que este cuento necesitaba para entender un poco más la trágica historia de la princesa.
Aunque no fue la única pieza recreada para la película, esta creación de alta costura tiene especial relevancia en el montaje final y es el que figura en el cartel de la película, que muestra a Diana encorvada sobre el suelo, con el cuerpo envuelto en capas de tul. Para Stewart, este vestido reflejaba la existencia a la vez privilegiada e infeliz de Diana: “Ver a alguien en el suelo del baño con un vestido así es devastador. Es inimaginable que alguien se sienta mal llevando algo tan espectacular, hermoso, único y especial. Me inspira una gran nostalgia”.
