Así serán los salones de belleza después del COVID-19
Una diversidad de medidas de higiene, distanciamiento social, cero abrazos y saludos distantes, así como mucha responsabilidad por parte de clientes y empleados es lo que le espera a este rubro para salvaguardar la salud de todos.
Con la apertura de los salones de belleza, las personas podrán revertir los daños que la cuarentena heredó a su cabello, con inexpertos cortes o autoaplicaciones de tinte. La demanda del servicio de peluquería será grande, así que las medidas de higiene tendrán que duplicarse en estos negocios.
Los nuevos protocolos para salones de belleza y peluquerías persiguen la seguridad y salud no solo de los estilistas y colaboradores dentro del rubro, sino también la de los clientes que tienen un papel fundamental en esto.
Estos lineamientos fueron propuestos por marcas expertas de productos especializados de salón y marcas con presencia en todo el mundo que se han dado a la tarea de estudiar cómo será el regreso al servicio.
“Esto tiene como base principal dos cosas: la responsabilidad del cliente y el trabajo de los estilistas y empleados. Ninguno puede fallar, porque si no ponemos en riesgo a todos. Lo que se busca es evitar al 100 % un contagio con estas nuevas normas”, aclaró el estilista Ricky Mina.
Reconoce que las nuevas normas de higiene implican un trabajo intenso y extra, pero “creo que si somos bien conscientes, después de un par de días se convertirá en un hábito que no nos pesará nada”, indicó.
Este tipo de servicio conlleva mucho contacto personal, por lo tanto, las normas protocolarias que se explican a continuación representan las acciones básicas que se deberán cumplir.
“No podremos tener mucho acercamiento físico. Tendremos que sonreír con los ojos y decir hola y adiós solo con las manos… Son cosas que, valorando la salud de todos, son importantes de cumplir”, enfatizó Mina.