El día del pancake o hotcake ha sido celebrado por los británicos durante siglos y está relacionado a un tema religioso más que culinario. La fecha exacta para celebrar el día cambia cada año, ya que está determinada por cuándo cae la Pascua. Siempre es el día anterior al miércoles de ceniza, que es el primer día de la Cuaresma y que por lo general cae en febrero o marzo.
Tradicionalmente, los panqueques se comían en este día para consumir alimentos ricos e indulgentes como los huevos y la leche antes de que comenzara la temporada de ayuno de la Cuaresma.
Pero aunque está consagrado en la tradición cristiana londinense, se cree que el día del pancake podría originarse en una fiesta pagana, cuando se comen pancakes calientes y redondos, que simbolizan el sol, como una forma de celebrar la llegada de la primavera.
Sin embargo la leyenda dice que la tradición nació en el siglo XV cuando una mujer particularmente desorganizada en Buckinghamshire se apresuró a ir a la iglesia para confesar sus pecados a la mitad del proceso de hacer este delicioso alimento.
A este día también se le conoce como ‘Mardi Gras’, o ‘martes gordo’. Esto se origina en Francia con el antiguo rito de desfilar un gran buey por París para recordar a las personas que la carne estaba prohibida durante el período de Cuaresma.
Tradicionalmente los británicos organizan carreras benéficas con un denominador común: los participantes corren disfrazados y con una sartén en la mano, mientras se lanzan pancakes al aire, esta idea surgió en Olney en 1445.
El pancake aparece en los libros de cocina desde 1439 y la idea de tirarlos es casi tan antigua. “Y todos los hombres y todas las doncellas toman su turno, y juntan sus panqueques para que se quemen”. (Palin de Pasquil, 1619).
¿Se te antojaron los pancakes? ¡Pues prepara los ingredientes y manos a la obra!