Desde hace más de 15 años, la familia Corvera vende dulces típicos en el kilómetro 45 de la carretera Panamericana, cerca del desvío de Santo Domingo, en San Vicente.
Si quieres probar deliciosas conservas de chilacayote, nance, higo, papaya y camote, entre otras variedades de confites, debes hacer una parada obligatoria en la dulcería Chanita.
José Felipe Corvera, propietario de la dulcería, cuenta que fueron de los primeros en colocar un puesto en esa vía principal que conduce al oriente del país.
“Por aquí pasan miles de carros a diario y a las personas siempre les dan ganas de un dulce. Muchas regresan al país de Estados Unidos y tienen años de no probarlos, se bajan y nos compran”, manifiesta Corvera.
El señor agrega que la mayoría de conservas son fabricadas por el grupo familiar. Desde la matriarca hasta los más pequeños.
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Santo Domingo es considerada la capital del dulce artesanal, ya que más del 70 % de su población se dedica a la elaboración y comercio de dulces artesanales, los cuales en su mayoría son vendidos en ferias de todo el país.
Sobre la carretera Panamericana, cerca del desvío al municipio, se pueden observar los más de 14 puestos de venta de dulces, entre los cuales se encuentra el de la familia Corvera, donde los artesanos venden más de 30 variedades hechas con frutas de temporada, o traídas de Guatemala.
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Según Corvera el trabajo de elaboración de dulces es un patrimonio que destaca al municipio a nivel nacional e internacional, ya que fue ahí donde comenzó el trabajo de crearlos de forma artesanal.