En la casa del chef Roberto Sartogo

El prestigioso chef italiano, radicado en El Salvador, abre su hogar para consentir a sus comensales con su novedosa propuesta “I 4 tavolini”.

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Foto Por Roberto Molina

Por Betty Carranza

2019-07-24 7:47:45

“I 4 tavolini” traducido al español es “Las cuatro mesas”, lo que refleja lo exclusivo de este restaurante. Aunque en realidad cuenta con seis mesas y con una capacidad máxima de 24 comensales. Bajo el concepto “home restaurant”, el reconocido chef Roberto Sartogo abre las puertas de su casa para complacer los paladares más exigentes, con su cocina 100% italiana.
Sartogo es un cocinero italiano radicado en El Salvador desde hace 25 años, en los que ha destacado por ser el propietario de restaurantes de primera categoría. El más conocido es “Il Bongustaio”, proyecto del que se retiró hace tres años.
Su rostro también es recordado por ser uno de los jueces más exigentes en “Top Chef El Salvador”.


“Decidí hacer esta experiencia nueva, en consideración a que después de 24 años de cocinar para los salvadoreños, los mismos clientes me empezaron a pedir que abriera algo”, reconoce este experimentado restaurantero.
La solicitud le llevó a repensar su regreso a la restaurantería pero no con el concepto clásico, de gran capacidad, con un menú fijo y con servicio de almuerzo y cena.
“Ya no tenía ganas de abrir algo de la manera clásica, ahora quiero jugar con la cocina, con los sabores, con los ingredientes que realmente encuentro”, asegura mientras muestra las nuevas instalaciones, una casa amplia donde dos áreas están dedicadas al restaurante.


Esta es la casa del chef Roberto y Daniela, su pareja. El área donde están las mesas era la sala, porque el concepto es que el chef recibe a los comensales en su vivienda. “No me interesa tener lleno, así es como quiero, abrir mi casa no solo para vivir la experiencia a nivel gastronómico, sino también a nivel de ambiente”, afirma.


La idea es dejarse envolver por un lugar hermoso, con una casa de 1901, hecha de madera y lámina, que fue el casco de la finca Vista Alegre, de San Salvador. Además, la edificación está rodeada por un parque de seis manzanas de bosque.
El restaurante brinda servicio solo para cenas y requiere reservación previa, pues si su nombre no está en el listado del día, no se le permite ingresar a la finca.


Propuesta gastronómica
El menú será siempre una sorpresa, dependerá del producto que el cocinero encuentre disponible ese día. La carta es presentada en una pizarra móvil con escritura de tiza, donde se presentan los platillos y se detalla el número de porciones disponibles.
Por supuesto, siempre habrá variedad de opciones, ya que el menú está estructurado según el sistema italiano: entrada, primer plato (que usualmente es pasta), plato fuerte con carne o pescado y su acompañamiento, y para finalizar el postre.
“Es como divertirme un poco, jugar con la comida y hacer divertida la experiencia para el cliente”, remarca Sartogo.
Si bien el cliente no sabe exactamente qué comerá esa noche, “la esperanza es que, por haber atendido por 25 años a los salvadoreños, ya más o menos saben que los puedo sorprender con algo que no los va a decepcionar”, concluye.