En pocas ocasiones apreciamos nuestro sistema inmunológico, ya que la mayoría de veces funciona de manera silenciosa, sin darnos cuenta, enfrenta cada día millones de microbios que acechan nuestro cuerpo, que en la gran mayoría de veces no nos harán daño, gracias a este “escudo” natural.
Afortunadamente, hay formas en que podemos ayudar a ese sistema de defensas.
No se trata de un elemento aislado y único que hará su efecto mágico y a prueba de todo o en específico que nos proteja por completo del temido Covid-19.
Según indica el Comité de Médicos para la Medicina Responsable, en su sitio www.pcrm.org, un factor clave es mantener un peso saludable. La obesidad se ha relacionado con un mayor riesgo de influenza y otras infecciones como la neumonía.
Además, recomienda incluir una alimentación variada, nutritiva, equilibrada con algo de ejercicio físico y suficiente tiempo de descanso, es decir, dormir para reponer las energías.
Las dietas más ricas en alimentos vegetales y fibra ayudan a perder peso, permiten saciarse sin calorías adicionales y potencian una mejor inmunidad.
Por ello, recomiendan el consumo de vitaminas, minerales y antioxidantes contenidos en frutas y verduras que proporcionan nutrientes, como el betacaroteno, la vitamina C y la vitamina E.
Algunas fuentes de betacaroteno son los camotes, zanahorias y vegetales de hoja verde.
Las fuentes de vitamina C incluyen pimientos rojos, naranjas, fresas, brócoli, mangos, limones y otras frutas y verduras.
Algunas fuentes de vitamina E son las nueces, semillas, espinacas y brócoli.
La Vitamina D puede reducir el riesgo de infecciones virales, incluidas las infecciones del tracto respiratorio. Las fuentes alimenticias de vitamina D son los cereales fortificados y las leches y suplementos de origen vegetal.
El zinc es un mineral que puede ayudar a aumentar los glóbulos blancos, que defienden contra los organismos invasores. Las fuentes incluyen nueces, pepitorias, ajonjolí, frijoles y lentejas.
Alimentos aliados
Estos alimentos pueden ayudar a estimular el sistema inmunológico:
Jengibre
Tiene propiedades antioxidantes y ayuda a desinflamar la garganta.
Brócoli
Es una fuente de vitamina C. También posee potentes antioxidantes, como el sulforafano. Su consumo frecuente ayuda a la salud del sistema inmunológico.
Chocolate negro
Contiene un antioxidante llamado teobromina, que puede ayudar a estimular el sistema inmunológico al proteger las células del cuerpo de los radicales libres. Debe consumirse con moderación.
Cítricos
Son ricos en vitamina C, que estimula la producción de glóbulos blancos, claves para combatir infecciones. Son especialmente recomendados para prevenir resfriados. Aquí se incluyen naranjas, limones, limas, toronjas y mandarinas en tu dieta diaria.
Zanahorias y camotes
Contienen betacaroteno, que es una fuente de vitamina A. Ayuda a mejorar la salud de la piel, la barrera mecánica más grande del organismo, con funciones defensivas inmunológicas.