Consentir a los seres que amamos con su postre o bebida preferidos son detalles que no se olvidan y que fortalecen aún más los lazos de cariño. Por ello hoy te invitamos a que disfrutes un ameno momento en casa, conversando, tomando café y probando algunas delicias chocolatosas.
Con un cheesecake, una suave panna cotta, una mousse o unas trufas, con el chocolate como ingrediente estrella, podrás conquistar al más exigente de los comensales. Y para que las recetas sean un éxito te compartimos algunos consejos.
– La mejor manera de derretir chocolate es a baño maría, esto es colocándolo en un recipiente de vidrio sobre una olla con agua hirviendo. Este proceso es más largo que cuando se hace en el microondas, pero según el portal thespruceeats.com te da más control sobre el proceso de derretimiento y menor riesgo de quemarte.
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– Siempre verifica el porcentaje de cacao del chocolate. Mientras más alto, será más puro. El natural contiene hasta un 80% de cacao, es menos dulce y tiene un sabor intenso. Los del 60 al 70% son ligeramente más dulces con un denso sabor a chocolate, ideales para muchas recetas.
– El chocolate con leche tiene un bajo porcentaje de cacao, leche, azúcar y aromas añadidos, lo que lo hace más dulce.
– El conocido como chocolate blanco no tiene cacao, pero está hecho con la grasa extraída de los granos durante el procesamiento.
Trufas caseras
Ingredientes:
8 onzas de chocolate oscuro, muy finamente picadas.
2/3 taza de crema espesa (Heavy cream).
1 cucharada de mantequilla sin sal, ablandada a temperatura ambiente.
1/2 cucharadita de extracto puro de vainilla
Coberturas: cacao en polvo sin azúcar, chispas de chocolate, nueces trituradas, chocolate derretido o templado.
Preparación
Coloca el chocolate junto con la mantequilla en un recipiente resistente al calor. Reserva.
Calienta la crema espesa en una olla hasta que hierva y viértela sobre el chocolate. Deja reposar durante 5 minutos, luego añade la vainilla y revuelve hasta conseguir una mezcla homogénea.
Después viértela en un molde para hornear de 8 × 8 pulgadas, para que se asiente de manera uniforme y rápida. Cúbrela con plástico de cocina y refrigera durante un par de horas
Para formar las trufas, separa porciones de dos cucharaditas o de una cucharada de la mezcla si las prefieres más grandes, y colócalas sobre una bandeja para hornear forrada con papel encerado. Luego cúbrete las manos con cacao en polvo, dales forma de bolita y luego cúbrelas con nueces, chispas de chocolate o cacao en polvo.
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A temperatura ambiente son deliciosas y te pueden durar hasta por tres días, mientras que en refrigeración pueden conservarse hasta por dos semanas.
Cheesecake de chocolate
Ingredientes:
Para la corteza
24 galletas sándwich de chocolate o más si quieres una corteza más gruesa.
5 cucharadas de mantequilla sin sal derretida.
Para el cheesecake
1/4 taza de café caliente.
1 taza de chocolate semiamargo.
3/4 taza de chocolate semidulce
24 onzas de queso crema a temperatura ambiente
1 pizca de sal
1 taza de azúcar.
1/4 taza de crema agria.
1 cucharada de extracto de vainilla.
4 huevos grandes a temperatura ambiente.
3 cucharadas de harina para todo uso.
Preparación
Precalienta el horno a 350 º F. Muele finamente las galletas y luego combínalas con la mantequilla derretida.
Transfiere la mezcla a un molde desmontable de ocho o nueve pulgadas y distribúyela uniformemente en el fondo y a los lados. Presiona con el fondo de un vaso alto para que se compacte y no pierda su forma. Hornea durante unos 10 minutos a 350 °F, retira y reserva. Reduce la temperatura del horno a 325 °F.
Para el relleno, coloca las chispas de chocolate en un bol y luego vierte el café caliente sobre ellas. Mezcla un poco y luego cocina en el microondas en intervalos de 20 segundos, según sea necesario hasta que se derrita, y revolviendo el entre cada vez. Reserva.
Procesa el queso en la batidora a velocidad media hasta cremarlo, agrega la sal y el azúcar, y sigue batiendo y raspando el tazón para obtener una textura homogénea.
Añade la crema agria y la vainilla, mezcla bien. Luego agrega los huevos uno a la vez, permitiendo que cada uno se incorpore antes de agregar el siguiente.
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Espolvorea la harina y continúa mezclando hasta que notes el queso completamente suave. Después vierte el chocolate derretido y combina bien con movimientos suaves.
Vierte la mezcla sobre el molde que preparaste, y colócalo en una bandeja para hornear grande. Hornea a 325 °F durante 20 minutos, luego reduce la temperatura a 300 °F y hornea por 30 minutos más o hasta que el borde de la torta esté firme pero el centro aún esté tierno.
Apaga el horno pero deja el cheesecake reposando dentro con la puerta cerrada durante una hora. Enfría de preferencia durante toda la noche. Puedes servirlo con una ganache o con virutas de chocolate.