Los bitcoins

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Manuel Hinds / Foto Por Archivo

Por Manuel Hinds

2021-06-05 6:19:23

El presidente ha anunciado, sin dar detalles, que el país adoptará como moneda de curso legal los bitcoins. Esto ha causado un pánico entre muchas personas, especialmente los asociados con el sector financiero porque la noticia puede ser o irrelevante para la seguridad del sistema, o terriblemente desestabilizante.

La posibilidad irrelevante para la seguridad del sistema sería que lo que el presidente quiere es hacer que el sistema bancario salvadoreño acepte los pagos hechos a través de bitcoin como si fueran hechos en cualquiera de los medios de pago actuales—efectivo, tarjetas de crédito, transferencias bancarias, etc. En este caso, lo único que tendría que hacer el gobierno sería regular las transacciones, muy importantemente cómo se calcularía el precio al que el banco lo aceptaría, en el momento de recibir el pago o en el momento de traducir el pago de bitcoins a dólares. Esto es muy importante porque, como se ve en la gráfica, la volatilidad de los precios en dólares del bitcoin es muy alta.
La posibilidad que sería peligrosa sería que el bitcoin se convirtiera en la moneda del país, sustituyendo al dólar, recordando que todo el resto del mundo seguiría usando el dólar para las transacciones internacionales. Vea la gráfica que muestra cómo ha fluctuado el precio de los bitcoins con el dólar, y lo entenderá. Suponga usted que recibió un préstamo a ocho meses plazo de un bitcoin en octubre de 2020. Eso sería equivalente a $10,785 (lo tendría que traducir a dólares para pagar todo lo importado y para pagar deudas, y la renta, y la comida, todo ligado a dólares, etc.) Pero de repente, cuando lo fuera a pagar en este mes, lo que tendría que pagar sería $36,780. Por otro lado, si usted hubiera depositado un bitcoin en abril, usted hubiera salido del banco con un depósito equivalente a $58,927. Pero al ir a chequear ahora, ese bitcoin seria equivalente a solo $36,780. ¿Se imagina usted los estados financieros de los bancos, y de todas las empresas? Como el mundo entero seguiría con dólares, el petróleo, las máquinas, los edificios, los salarios, se cotizaría en dólares, la inestabilidad de las empresas sería terrible. Para protegerse de estas subidas y bajadas, los bancos tendrían que cobrar tasas increíblemente altas de interés, con lo cual se perdería la ventaja de la dolarización que nos da las tasas de interés más bajas de América Latina, con Panamá.

Una tercera posibilidad, mencionada en algunos rumores, sería que el país usara los bitcoins como reservas del país, en la idea de que “siempre suben de precio”. Como todo el mundo sabe, las reservas tienen que depositarse en activos que son muy seguros porque las reservas protegen la habilidad del país para hacer pagos al exterior. Invertir las reservas del país en activos volátiles es como jugarse los ahorros de la familia en la lotería. La gráfica muestra la volatilidad de los precios de los bitcoins. La gente puede pensar que sólo últimamente ha habido pérdidas. De enero del 2018 a marzo de 2019 el bitcoin perdió el 73% de su valor, de agosto de 2019 a abril de 2020 el 36%. Es como ir a Montecarlo.

Así, en la medida que de lo que se trata es de usar los bitcoins como medio de pago no hay por qué alarmarse. Si se quiere usar como la moneda, lo que establece el valor de todas las cosas en el país, sería una locura. A veces un bitcoin le alcanzaría para pagarse un Mercedes Benz y a veces apenas un carrito usado. A veces lo que tendría en el banco le alcanzaría para pagar la planilla y a veces no.

Hay otro aspecto con el que hay que tener cuidado con los bitcoins. Por sus características como medio de pago, es el favorito de las mafias y los lavadores de dinero porque las transacciones son totalmente secretas, a menos que pasen, una a una, por el sistema bancario. Allí, en el sistema bancario, queda constancia de a quién se hicieron los pagos. Si no pasan por el sistema, las transacciones se vuelven totalmente secretas, ideales para el lavado de dinero y para objetivos criminales.

Ojalá que el gobierno esté pensando en usar el bitcoin sólo como medio de pago, y a través del sistema bancario, porque si no, es como efectivo—el paraíso de los lavadores.