Médicos y personal de salud, héroes en la lucha contra la pandemia

Médicos y enfermeras en su mayoría nos ayudaron a nacer, a traer al mundo a nuestros hijos, a cuidarlos durante su desarrollo como asimismo asistieron a muchos de nuestros seres queridos a finalizar sus días en paz, mitigando en lo posible sus sufrimientos.

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Eduardo Cader, presidente de la ASI. Foto Twitter

Por El Diario de Hoy

2021-07-13 6:37:55

Los médicos, en unión con el personal de salud, han sido los héroes en la lucha contra la pandemia, pese a no contar ni con la adecuada protección ni los implementos ni el apoyo necesario para desarrollar su labor, lo que costó la vida a más de 200 profesionales, entre médicos y personal auxiliar.
En este día dedicado al gremio médico y por extensión a quienes apoyan su labor, los salvadoreños en unión de familiares y pacientes suyos, debemos recordar y agradecer a quienes nos han aconsejado, curado, asistido en nuestras dolencias, contribuido a mantenernos sanos o a llevar sin tanto sufrimiento dolencias diversas.
Médicos y enfermeras en su mayoría nos ayudaron a nacer, a traer al mundo a nuestros hijos, a cuidarlos durante su desarrollo como asimismo asistieron a muchos de nuestros seres queridos a finalizar sus días en paz, mitigando en lo posible sus sufrimientos.
Mucho avanzó la medicina desde la época de nuestros abuelos, que no contaban con antibióticos (el descubrimiento del inglés Fleming) ni vacunas para muchos males ni aparatos para diagnosticar y más bien se guiaban por el sentido común para aliviar en la medida de lo posible a los enfermos.
Hasta hace poco tiempo no había comprensión sobre las alergias, no se conocía el grave perjuicio del tabaco sobre el organismo, respecto al nocivo efecto que ciertas sustancias pueden tener sobre infantes antes de nacer (como precisamente sucede con el alcohol y el tabaco, pese a lo cual muchas mujeres encintas no se privan de tales venenos).
La gran mayoría de profesionales de medicina desarrollan su labor con el espíritu de un apostolado, dando tiempo para asistir a pacientes en hospitales de caridad, como docentes, atendiendo emergencias.
A lo largo de esta pandemia una mayoría de médicos se opuso a que muchas medidas y decisiones se tomaran con base en desplantes políticos, sin consultar con epidemiólogos y conocedores del asunto los pasos que deberían darse, como lo ha venido señalando el Colegio Médico al igual que connotados profesionales y personas guiadas por el sentido común.
Todos recuerdan que el actual régimen llegó al extremo de negarles a los médicos en primera línea un seguro para sus familias en caso de fallecimiento y no dudó en dejar pasar tiempo vetándolo y llevando el caso hasta la Sala de lo Constitucional, que terminó avalándolo, pero ya habían pasado varios meses. Entonces el ministro de Salud salió diciendo que ya tenían $3 millones para pagar las primas del seguro, como si fuera una iniciativa propia. Sin embargo, las familias de los médicos han denunciado que aún no reciben el beneficio a un año de aprobado.

Nuestros corazones deben condolerse con lo que sucede en muchas partes del mundo

Hubo un tiempo en que todo profesional egresado de una escuela de medicina se comprometía, con el Juramento Hipocrático —el juramento del primer gran médico que registra la Historia, el griego Hipócrates—, a asistir a quienes necesitaran esa ayuda y socorro, indistintamente de su condición social, como una mayoría lo hace al día de hoy.
Nosotros en este suelo y pese a las tribulaciones por las que venimos pasando podemos considerarnos afortunados de tener lo que tenemos, pensando no solo en países que sufren una catástrofe sanitaria de espanto, como en la narcodictadura venezolana —donde los neonatos mueren por falta de incubadoras y otros por carencia de medicinas y hasta de guantes quirúrgicos—, sino también lo que es horror en muchas regiones de África y de Asia sin médicos, sin hospitales y encima sufriendo escasez de agua y de alimentos, tragedias conmovedoras.