¿A qué deben Suiza y otros países su bienestar? A su civismo, tradiciones, su institucionalidad…

A causa de la corrupción, de regímenes ocupados primordialmente en el bienestar de sus miembros y no el de la gente, vamos hacia atrás, retrocediendo en la historia.

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Mauricio Arriaza Chicas, director de la Policía, tiene fuero constitucional por haber sido juramentado hace unas semanas como viceministro de Seguridad. Foto EDH / Archivo

Por El Diario de Hoy

2020-11-12 10:00:34

¿Por qué Suiza es un país tan próspero y rico, como con sus variantes se puede también decir de Francia, de Japón, de Taiwán, de Corea del Sur?

Hace poco tiempo se recopiló toda la información del valor económico de toda la Tierra, las edificaciones, el valor de las patentes, los ingresos, reservas monetarias, de lo que produce cada ciudadano, pero ese total, inmenso, es aproximadamente la mitad de la riqueza de Suiza.

La diferencia la hace la institucionalidad, la seguridad, las tradiciones y buenas costumbres, el civismo de la gente, un aporte intangible e invisible a sí mismos que se hacen los suizos, para ponerlo en términos fáciles.

Lo inverso a esa condición es lo que prevalece en países bajo dictaduras, desordenados, en permanente conflicto consigo mismos, como en Cuba, en Irán, en Venezuela y lamentablemente en nuestro suelo, bajo acoso de personas y grupos amorales, de corruptos y mesiánicos.

Turquía, bajo un desquiciado, Erdogan, está empobreciéndose, pues además de destruir la democracia fundada por Mustafá Kemal, Ataturk, se le acusa de sostener bandas sediciosas en Libia y, lo más repugnante, persigue a los kurdos, una etnia masacrada por los turcos a principios del siglo XX.

Los que lograron escapar la masacre se refugiaron en varios países; Kardashian, el apellido de una  familia de famosos estadounidense, es kurdo.

Los kurdos descienden de los Hititas, un pueblo parte de las primeras migraciones arias que poblaron la península griega y el Asia Menor, invasiones que culminan con la llegada de los dorios, que sentaron la base del posterior desarrollo helénico y su esplendor, dejando un legado que es parte esencial de la civilización.

Las dictaduras al igual que regímenes mesiánicos como el español de Pedro Sánchez, aliado con grupos extremistas como los vinculados a Eta, los separatistas catalanes y Podemos, una banda parida por la narcodictadura de Maduro, empobrecen..

España, país extraordinario, cuna de nuestra civilización hispanoamericana, está pasando dificultades económicas, precisamente a causa del señor Sánchez y sus aliados.

Algunos, muy de buena fe, creen que la solución a estos problemas es a través de la educación, pero al mismo tiempo se dan cuenta de que primero habrá que educar a los maestros, lo que cae en contradicciones: la primera, averiguar quiénes van a educar a los mentores y luego determinar qué garantías hay de que ellos, a su vez, van a responder adecuadamente, lo que posterga en al menos un par de generaciones contar con suficientes ciudadanos imbuidos del apropiado civismo “para hacer una diferencia”.

Por desgracia no “tocamos fondo”; bajo el cleptodesgobierno seguiremos hundiéndonos

Históricamente las naciones y culturas que actualmente pueden considerarse como organizadas y estables, donde la mayoría de pobladores se comportan con una medida adecuada de cordura y prevalece el principio de “mi derecho termina donde comienza el de otros”, tomaron decenios, varias generaciones para lograrlo.

Hubo que vencer prejuicios, educar primero a grupos de niños, luego de niñas hasta llegar a la obligatoriedad de la enseñanza, alfabetizar… al día de hoy existen analfabetos en países desarrollados como en naciones del Segundo y Tercer mundos.

En tal sentido, a causa de la corrupción, de regímenes ocupados primordialmente en el bienestar de sus miembros y no el de la gente, vamos hacia atrás, retrocediendo en la historia.

Nunca “se toca fondo”… si las cosas están peor que antes, pueden empeorar, sobre todo bajo el actual cleptodesgobierno…